La escena musical está de enhorabuena, acabamos de disfrutar de una de las mejores ediciones del concurso de música local que se recuerda en muchos años. Por cantidad de maquetas presentadas y, por supuesto, la calidad y variedad de los finalistas. No hay mejor forma de comprobar que los albaceteños más jóvenes gozan de una muy buena salud sonora que tomándole el pulso a este certamen que es una auténtica joya cultural local. Además, su inclusión en la programación del tercer Antorchas ha sido un gran acierto para celebrar. Que los grupos escogidos por el jurado, para tocar en su finalísima, pudieran hacerlo en la inmensidad del escenario principal del festival fue un regalo que se merecían y que, además, miles de amantes de la música emergente pudieron disfrutar el jueves pasado en nuestro icónico Recinto Ferial. No se recuerda una final tan disputada, gozada y bailada en mucho tiempo. Con el buen sabor que nos dejaron artistas y bandas como Álvaro Halley, Big Natural, El Arte de Frío, Ojito Pestaña, Jam 85, Clara Martín y Mike Teller, entre otros, es el momento de recordar que por algunas razones que no se llegan a entender el Memorial Alberto Cano ha estado a punto de desaparecer en varias ocasiones. La falta de sensibilidad -tanto política como técnica- ante una propuesta tan valiosa e histórica, que no en vano este año ha cumplido 35 años, lo abocaba a un final que hubiera supuesto una gran pérdida para nuestro panorama local musical. Su paso desde el negociado de Juventud al de Cultura fue clave para que, desde allí, y con María José Pardo como principal rescatadora, el Memorial resucitara y volviera, poco a poco, a convertirse en lo que fue y ahora, de nuevo, es: la cita más importante de las nuevas generaciones sonoras del prestigio musical de una ciudad como Albacete, cuna de Surfin' Bichos, Rozalén, Angelus Apátrida, Jacobo Serra o Shoda Monkas, entre otros muchos. Ahora tras felicitarnos porque el San Juan, que es como se le llamaba hace décadas, haya vuelto a sus fechas originales, cuente de nuevo con decenas de artistas que quieren demostrar su talento y se celebre en un espacio que hace soñar, es la hora de pensar en su futuro más inmediato. Y eso pasa porque, por fin, se le considere como lo que es, la cita más importante del año en Albacete en cuanto al vivero sónico se refiere. Enhorabuena a todos los que corresponde y a seguir cuidándolo. ¡Larga nueva vida al Memorial!