El éxito es la meta para cualquier persona. Se busca insistentemente y se utiliza todos los caminos posibles para conseguirlo. Es el caso de los premiados en la última edición de los premios empresariales San Juan, de FEDA, que se celebraron el pasado viernes en el Palacio de Congresos. Un ramillete de empresarios, veteranos y noveles, acapararon todos los elogios en una noche que es una cita imprescindible en el calendario social de la ciudad.
Uno de los premiados, el cantautor Jacobo Serra -mención especial del jurado-, se sorprendía ante la calidad de sus compañeros galardonados y del nivel que había en el empresariado albacetense. Y es que esta tierra, desde hace décadas, es territorio de emprendedores y de empresarios de éxito. Una buena muestra de ello fue el plantel de premiados por FEDAen esta ocasión, unos premios San Juan trasladados a octubre por la pandemia, pero que, si nada lo impide, volverán a su fecha de junio en 2022. Pero el empresario y el emprendedor deben estar arropados por el resto de la sociedad para que sus proyectos alcancen el éxito y aquí topamos con las comunicaciones. Desde hace siglos, Albacete se convirtió en un punto estratégico para el comercio, pero desde hace unas décadas pasó a un segundo plano, al perder unas comunicaciones de primera categoría y no desarrollarse en tiempo y forma otras, como la autovía A-32. Es necesario que el Gobierno dote a esta provincia de esas infraestructuras necesarias para que la generación de riqueza continúe y la sociedad albacetense no se empobrezca en favor de otros territorios.