El PSOE Provincial de Albacete, encabezado por su secretario general, Santiago Cabañero, ha celebrado este sábado su tradicional comida de Navidad en el Hotel Palacio de Albacete. Un encuentro al que han asistido cerca de doscientas personas, entre integrantes de la Comisión Ejecutiva Provincial, con el secretario de Organización, Fran Valera, al frente; militantes y simpatizantes de las distintas Agrupaciones Locales de la provincia, y que ha contado también con la participación especial del secretario general del PSOE de Guadalajara y presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido. Previamente a su celebración en un encuentro con los medios de comunicación, Caballero aseguró que como secretario general se siente orgulloso del trabajo que «están haciendo en los ayuntamientos, los alcaldes, los concejales y también en los sitios en los que estamos en oposición, donde estamos haciendo una oposición constructiva, responsable».
«Estamos demostrando que las recetas clásicas de la socialdemocracia no son incompatibles con que la economía vaya bien, sino todo lo contrario. Y si en situaciones en las que vienen bien dadas estas recetas son la mejor receta, pero cuando vienen mal dadas, todavía más», puntualizó Cabañero para añadir que «lo hemos vivido en los últimos tiempos en Letur, donde hemos visto cómo las instituciones han respondido desde la solidaridad, por supuesto, pero la solidaridad bien entendida. Estamos viendo como desde la antipolítica se está reivindicando eso de que el pueblo salva al pueblo, pero lo que yo quiero es que sea lo público quien garantice el rescate. No quiero depender si vienen mal dadas de la solidaridad del vecino. Quiero que un Estado social, uno de Derecho me garantice mis prestaciones y mis derechos».
De la misma opinión se mostró Pablo Bellido quien lanzó un mensaje de gratitud del conjunto de la región por el esfuerzo y el comportamiento «que ha tenido con una tragedia que ha padecido particularmente esta provincia, el municipio de Letur, y donde las instituciones, la Administración General del Estado, el Gobierno de Castilla-La Mancha y la Diputación se han volcado de manera especial, y también los alcaldes de la comarca»