Antonio García

Antonio García


Periodismo deportivo

12/08/2024

Las medidas que se propone el Gobierno para combatir las falsedades y las malas prácticas periodísticas sólo se fijan, por lo que sé, en el ámbito político, que es donde más les duele, pero no incursionan en otro terreno donde la toxicidad es mucho más llamativa. Me refiero al periodismo deportivo. ¿Se plantearán alguna vez que la regeneración del periodismo, en su lucha por la veracidad, debería incluir también la obligación de ser parciales en el relato deportivo? Es éste un periodismo tendencioso que alcanza cumbre de bochorno patriotero en las competiciones internacionales en que intervienen españoles. Misión del periodismo es registrar los acontecimientos de la manera más objetiva con finalidad exclusivamente informativa o analítica, sin exhibición de plumero, convención que estalla por los aires cuando se trata de eventos deportivos. Obviamente todo periodista, a título privado, tendrá una decantación, pero ésta no debe aflorar en su relato. ¿Imaginaríamos a un cronista político jaleando a un candidato en campaña electoral, con el mismo entusiasmo que los asistentes al mitin? Pues ello ocurre en las retransmisiones deportivas, como las olimpiadas, en las que para mayor inri y, por mor de la paridad, los locutores suelen ser dos, hombre y mujer. Lo que podría haber sido una formidable ocasión para garantizar la ecuanimidad -cada uno defendiendo a un equipo- quedó frustrado desde el momento en que los dos alentaban al mismo, que inexcusablemente era el español. No se entiende que a estos comentaristas no se les permitiera subir también al podio o siquiera lamer un poco la medalla de bronce (morderla es privilegio de los deportistas) a la que tanto han contribuido con sus aclamaciones.