Efectivos del Servicio Contra Incendios y Salvamento de la ciudad tuvieron que actuar en el antiguo edificio Legorburo en la noche del miércoles debido al desprendimiento de un trozo de la fachada, de la parte de arriba. Su misión consistió en evaluar la situación, ayudados de un dron, y determinar si los desperfectos de la estructura que cayeron a la acera podrían ser objeto de un peligro para la seguridad ciudadana.
Hasta el lugar del suceso también se desplazaron los técnicos de la Gerencia de Urbanismo y la comunidad de vecinos. Una vez perimetrado el edificio desde hoy trabajan subsanando los desperfectos operarios de una empresa que realiza trabajos verticales sin necesidad de andamiaje. «Parece que se podrá acceder desde las ventanas del edificio para fijar o para sellar lo que se había desprendido».
Así lo indicó el alcalde de Albacete, Manuel Serrano, que habló de este incidente en el Pleno ordinario de ayer, señalando que «fue un accidente». Además, precisó que la caída de trozos de la fachada lesionó a una persona, que estaba pendiente de unas pruebas.
Serrano puntualizó que «hay que actuar sobre ese edificio protegido con todos los permisos», al tiempo que recordó que antes del suceso se había solicitado una licencia para reparar el edificio, que presentaba algunas grietas, cuestión en la que trabajan desde la Gerencia Municipal de Urbanismo en colaboración con Patrimonio.
El alcalde precisó que los trabajos estarán finalizados para la Cabalgata de apertura de la Feria.