La provincia de Albacete registró en el primer semestre del año un total de 362 nuevas empresas, lo que supone un incremento interanual del 9,04% respecto al mismo período de 2023, cuando se contabilizaron 332, según se extrae de los últimos datos de sociedades mercantiles hechos públicos este viernes por del Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondientes a junio.

En ese mes, la provincia incorporó 58 nuevas sociedade frente a las 46 que se habían anotado un año antes, lo que arroja un crecimiento del 26,09%. Según el informe, estas empresas echaron a andar con un capital total de 630.000 euros. 

Marzo fue el mes del semestre en el que más empresas nuevas se contabilizaron (78), mientras que el dato más bajo se registró en abril (53). Por encima de este último se situaron enero (55), mayo (56), junio (58) y febrero (62). 

En el semestre del año anterior, la mejor cifra se consiguió en febrero, con 84 nuevas empresas, mientras que abril fue también el mes que presentó menos sociedades de nueva creación (34).  

En cuanto a la tipología de las nuevas empresas constituidas de enero a junio, la práctica totalidad fueron sociedades limitadas, 360 del total, mientras que solo se contabilizaron dos nuevas sociedades anónima.

BAJA EL CAPITAL. A pesar del aumento que se ha producido en el número de nuevas empresas en el semestre de este año, en el apartado de capital se produjo una bajada del 6,53% al haberse pasado de los 13,4 millones con los que arrancaron las sociedades el año pasado a los 12,5 en este ejercicio.

No obstante, en esta cuestión hay que puntualizar que las empresas que iniciaron su actividad en junio de 2023 englobaban una importante suma de capital, en concreto de 7,3 millones de euros, lo que distorsiona el dato global del primer semestre del año anterior. Este 2024, el mes con un mayor capital constituido fue enero, con 3,7 millones de euros, lejos de aquella cifra.

El dato es también positivo en el apartado de disolución de sociedades, donde se ha experimentado un descenso del 16,67% en el primer semestre del año, 15 empresas dejaron de trabajar frente a las 18 que pararon en el mismo periodo del ejercicio anterior. 

De estas empresas que echaron el cierre, cuatro de ellas lo hicieron voluntariamente, otras cuatro se produjeron por fusión con otras sociedades y las siete restantes, por otras causas.