Un bello homenaje al mundo rural

V.M.
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Un gran mural dedicado a las faenas y oficios tradicionales de la Sierra del Segura fue inaugurado en la Plaza de la Orden de Yeste, junto a un centro de reunión para gente de la localidad y sus pedanías

Imagen del cartel junto a varios de los miembros de la Asociación Cultural Romeros de San Bartolomé. - Foto: Luis Llopis

La Asociación Cultural Romeros de san Bartolomé de Yeste inauguró el pasado jueves la primera fase de su último proyecto, realizado en el lugar más céntrico de la población serrana: La Plaza de la Orden (de Santiago).

El presidente del colectivo, Luis Llopis (en la imagen de abajo, a la derecha), comentaba a este diario que la iniciativa tiene varios objetivos, en primer lugar la mejora urbanística, el embellecimiento de la zona y la recuperación de la plaza como lugar de recreo y visita turística, «ya que pretendemos mejorar nuestro potencial urbanístico y artístico y lograr que el visitante disfrute de una mejor imagen de la población; en ese sentido la Plaza de la Orden es un espacio situado en un lugar privilegiado y actualmente está muy desaprovechado, tanto que en muchas situaciones pasa desapercibido para lugareños y visitantes», apunta.

Para mejorar esa situación se ha realizado un gigantesco mural que ocupa una buena  parte del perímetro de la plaza, que representa faenas y oficios tradicionales en la Sierra del Segura «y pretende ser un homenaje a nuestro mundo rural y su gente, verdadero corazón de la vida y la economía de Yeste durante siglos (como reza el cartel que describirá este mural a los futuros visitantes)».

«El segundo objetivo -precisaba Llopis- es crear un centro de descanso y reunión para la gente de las aldeas, mayores en su mayoría, donde puedan reposar e intercambiar experiencias en un entorno  agradable y decorado como homenaje a su legado y contribución en el mantenimiento del medio rural; para eso se ha rehabilitado y decorado el espacio que antaño albergó la antigua Oficina de Turismo, y más tarde un Centro de Artesanía, que queda ahora con los fines de sala de descanso y como espacio para reuniones o actos que puedan desarrollarse en un espacio de modestas dimensiones, que está decorado con mobiliario rústico y con paneles que contienen fotografías de artesanos de Yeste, muchos ya desaparecidos, pero cuyo trabajo permanece en nuestra memoria, tal y como también lo hace el pintor José  Antonio Lozano Guerrero con algunas de sus obras geniales que tanto admiramos y que aquí podemos ver en gran formato».

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