El Ayuntamiento de El Bonillo abrió ayer un plazo de 15 días hábiles para la presentación de solicitudes de una convocatoria de ayudas a microempresas y trabajadores autónomos de la localidad afectados por la declaración del estado de alarma por la crisis del Covid-19. Lo hizo a través de la pertinente publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) de las bases, previamente aprobadas en los órganos colegiados municipales.
El Consistorio se une así a otros municipios albacetenses que han optado por destinar fondos propios a los negocios locales, a través de diversas fórmulas. En el caso de El Bonillo, la partida presupuestaria disponible es de 25.000 euros, que podría ampliarse hasta un 20%, y las subvenciones se dirigen de forma específica «a microempresas (aquellas que ocupan a menos de 10 personas y cuyo volumen de negocios anual o balance general anual no supera los dos millones de euros), autónomos y cualquier otra forma organizativa, como comunidades de bienes o sociedades limitadas».
De acuerdo a la motivación publicada por el Ayuntamiento, se decidió así porque «lo relevante no es la forma jurídica que reviste la empresa sino la realidad que encierra que es la organización empresarial, por pequeña que esta sea, para pueda continuar su actividad económica y por tanto sea el medio de conservación del medio de vida de estas personas».
Las subvenciones se dirigen a empresas que tuvieran que cerrar su actividad con motivo de los dispuesto en el artículo 10 del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo. Deberán acreditar que lo hicieron, así como que habían retomado esa actividad a la fecha de la publicación de la convocatoria. Otros requisitos son encontrarse de alta en el Impuesto de Actividades Económicas en el Ayuntamiento de El Bonillo, que exista alta en la Seguridad Social, no haber sido sancionado por infracciones en materia de prevención de riesgos o de derechos de los trabajadores o haber justificado cualquier subvención que le haya sido concedida con anterioridad por el Consistorio.
El equipo de Gobierno estableció una cuantía máxima de 1.000 euros por ayuda, que podrán destinarse a gastos necesarios para continuar con la actividad.
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