El Bueno Arenas Albacete Basket sufrió una dolorosa derrota en un partido que se torció nada más comenzar y que fue plácido para el Guuk Gipuzcoa Basket, que mediado el segundo cuarto ya ganaba por más de 20 puntos al conjunto albacetense. La única noticia positiva fue las buenas sensaciones que dejó el debutante Guillem Ferrando, que acabó siendo el máximo anotador de los locales con 13 puntos en un partido para olvidar.
Los de David Varela necesitan victorias y el técnico veía este partido como «una oportunidad» pero su equipo estuvo espeso en ataque y blando en defensa, lo permitió al conjunto vasco tomar ventaja en los primeros compases del encuentro y marchar con paso firme a una nueva victoria.
Metió Aurrecoechea la primera canasta del encuentro, fue la única vez que el Albacete Basket estuvo por delante. Pronto empezó la máquina anotadora de Jaworski desde la línea de tres puntos. Varela intentó parar la sangría con 4-12, pero el tiempo muerto no mejoró nada y el primer cuarto acabó 10-28.
En el segundo parcial mejoró el Albacete Basket en ataque, pero la ventaja visitante seguía creciendo. Guillem Ferrando debutó con un par de triples, pero las rotaciones de Lolo Encinas también aportaban muchos puntos y el marcador al descanso no podía ser más desesperante para la parroquia local, 26-50. El Gipuzcoa Basket estaba dominando todas las facetas del juego y Varela no encontraba la manera de cambiar la dinámica del encuentro.
Tras el descanso, el partido no varió ni un ápice su desarrollo, los visitantes anotaban con comodidad, mientras el Albacete Basket se encomendaba a los triples inesperados de Juanjo Santana, que anotó dos casi consecutivos, pero las distancias seguían siendo abultadas (35-59) y Víctor Ruiz hacía su cuarta falta con mucho todavía por jugarse. Volvía a atascarse el equipo albacetense en ataque y la diferencia sobrepasó los 30 puntos, ante la desesperación de la grada. Con 38-71 acabó el tercer periodo y la sensación de que el partido llevaba ya mucho tiempo decidido.
En el último cuarto Gipuzcoa bajó el ritmo, al menos a nivel ofensivo, aunque tampoco tenía que esforzarse mucho en defensa porque los ataques locales tampoco eran como para preocuparse. Ganó el último parcial el Albacete Basket, pero cuando el encuentro estaba ya sentenciado a favor del equipo visitante.