A unque solo faltan siete días para que abran las Puertas de Hierro, aún es posible aprender a bailar manchegas para la ocasión. El Grupo de Danzas de Magisterio invita a todos aquellos que quieran aprender unas nociones básicas de la seguidilla manchega, o perfeccionar sus habilidades, a participar en los cursos intensivos que ofrecen, totalmente gratis, en su Caseta de la Feria.
Estos cursos de manchegas se hacen en dos sesiones, de una hora, el viernes y el sábado, a partir de las 20,00 horas. Año tras año, desde hace una década, los bailarines de Magisterio ayudan a los asistentes a aprender los pasos y los movimientos básicos. Entre 200 y 300 personas suelen participar en estos cursos intensivos.
Hace ya 23 años que Magisterio empezó a montar su propia caseta en la Cuerda. Su intención, explica Carmen Guerrero, no era otra que dar un contenido cultural a la Feria de Albacete. El grupo de Magisterio, que se formó en 1977, forma parte de una asociación cultural preocupada por la conservación y difusión de la cultura y las tradiciones manchegas.
un hábitat muy manchego. Con este ánimo decidieron montar su propia casa en la Feria, pensaron en una caseta que estuviese abierta a todo aquel que quisiera pasar, no solo a los socios, y donde reinase lo manchego por encima de todo, «esa es nuestra seña de identidad, nuestro traje no es el de faralaes, ni nuestra feria es la de Málaga o Sevilla, con respeto a otras comunidades», aprecia Guerrero, para quien la Caseta de Magisterio se abre cada día en Feria para que «quien es manchego, se sienta en su hábitat, y para quien no lo es, que nos descubra, porque Albacete está aún por descubrir».
La Caseta de Magisterio se ha resistido al fenómeno de las discotecas en la Cuerda y ha logrado conservar su esencia cultural. «Nos han ofrecido alquilarnos el espacio a partir de las 12 de la noche, pero no hemos querido», desvela Guerrero, que habla del esfuerzo que suponer para una asociación mantener este espacio en la Feria, «no lo tenemos como un negocio, sino para cubrir los gastos que rondan entre los 10.000 euros y 15.000 euros». Aunque la hostelería la delegan en un empresario del sector, se preocupan de que los precios no sean abusivos y tratan de que se sirvan platos vinculados a la tierra y de calidad; este año el plato estrella serán los gazpachos con torta de Letur.
Año tras año, los socios de Magisterio se esfuerzan por enriquecer la decoración manchega del lugar y se preocupan de llenar su caseta de folklore. Las representaciones más formales quedan reservadas para el escenario del Parque de Abelardo Sánchez donde Magisterio coordina desde hace décadas la Muestra Internacional de Folklore. Pero pasada la media noche es en su carpa donde la música y el baile se abren paso en un ambiente más informal.
música noche tras noche. Este año han aceptado su invitación varios grupos de la ciudad y alguno también de los que vienen de fuera para participar en la Muestra de Folklore.
A lo largo de los diez días de Feria actuarán en la carpa de Magisterio a partir de las 12,30 horas la Trova del Llano, el Grupo Rociero Virgen de los Llanos, la Casa de Aragón, Espigas de la Mancha, Raíces del Llanos y un grupo de Aguas Nuevas llamado Aires de la Mancha.
«Les invitamos a venir a nuestra carpa, no cobran nada, les invitamos a cenar y a cambio llenan de folklore nuestra carpa que está abierta a todo el mundo», explica Guerrero. También pasarán por la carpa el grupo Storaque de Málaga, una agrupación folclórica de Mora (Toledo) y un grupo llegado de Uruguay. «Estos grupos son amigos que vienen a la Feria, por el día bailan, por la noche disfrutan e incluso les organizamos visitas turísticas por la provincia, los llevamos a Chinchilla y Alcaraz».
Tradicional es ya también la cita de la madrugada. Sobre las 2 de la mañana, Magisterio hace sonar el Para bailar manchegas... en la Cuerda y son miles las personas que se dan cita, unos para bailar y otros para disfrutar de este paréntesis folclórico en la noche ferial. «Un año estábamos tanta gente que no cabíamos en la caseta, por eso nos salimos a la puerta y así empezó esta tradición de las manchegas a las 2 de la mañana que ya llevamos años haciéndola y que ha dado lugar a que alguna noche se junten allí alrededor de 3.000 personas», resalta Guerrero.