El BSR Amiab volvió a caer en la final de Copa del Rey frente a su bestia negra, el CD Ilunion. El equipo de Abraham Carrión tuvo momentos buenos y mandó en el marcador durante algunos minutos, pero mediado el tercer periodo se le acabaron las fuerzas y el equipo madrileño no perdonó, para imponerse 78-71.
Empezó bien Amiab, con mucha intensidad defensiva, tratando de entorpecer mucho el potente juego ofensivo de Ilunion y cogió la primera ventaja (6-10). Las faltas personales provocaban cambios en el equipo madrileño y la salida de Pincho Ortega fue aire fresco para el juego ofensivo de Ilunion. Entre Ortega y O'Neill machacaron una y otra vez el aro albacetense y con un parcial de 11-0 el partido pasó a ser dominado por los madrileños (17-10).
Pratt tomó responsabilidad y con un triple y unos tiros libres el partido se volvía a igualar (19-17). La intensidad era máxima a nivel defensivo y una buena última jugada provocó la canasta fácil bajo el aro de Ben Fox para dejar el marcador 21-19 al final del primer cuarto.
El CD Ilunion celebra un nuevo título copero en su palmarés. - Foto: FEDDFEl objetivo de Amiab era defender muy fuerte para evitar el potente juego ofensivo de su rival y madurar muy bien las jugadas en ataque, pero la intensidad con la que se jugó les iba a pasar factura. La igualdad era máxima (23-23) y con buenos movimientos ofensivos que acababan con tiros cómodos desde la bombilla lograba Amiab coger el mando del marcador mediado el cuarto (27-31). Salazar tomaban la iniciativa ofensiva en los albacetenses y con 30-35 Víctor Ramos pedía un tiempo muerto porque el parcial a favor de Amiab era de 9-16.
Las canastas de O'Neill daban vida a Ilunion, pero los albacetenses mantenían su ventaja en cinco puntos (36-41). Un tiro sobre la bocina de Ortega, que los árbitros revisaban y daban por válido, apretaba el marcador al descanso (41-43). Ilunion llegó a ponerse en esta primera parte con siete de ventaja y luego había sido Amiab el que había logrado las misma ventaja.
El japonés Fujimoto, que no jugó en las semifinales, apareció para empezar el tercer cuarto con un triple. Mantenía el mando en el marcador Amiab, pero Ilunion no dejaba de martillear el aro albacetense para no dejarle escaparse. Ortega era una pesadilla, pero los lanzamientos de Fujimoto mantenían la ventaja albacetense mediado el cuarto (49-54). Pratt erraba un par de triples y un lanzamiento dos, con lo que Amiab se atascaba y los madrileños, con seis puntos consecutivos de Warburton, se ponían por delante (55-54).
sin oxígeno. En ese punto de partido se acabó el oxígeno para el Amiab. El balón no quería entrar y una nueva canasta de Warburton (57-54) provocaba el tiempo muerto de Abraham Carrión. El atasco ofensivo albacetense, con solo dos puntos en cinco minutos, dejaban el marcador 61-56 a favor de Ilunion.
En el último cuarto no mejoró la cosa, porque la energía se había agotado. A siete minutos para el final Carrión volvía a parar el partido con un tiempo muerto porque Ilunion tenía siete de ventaja (67-60) y el momento era crítico.
Con las pilas agotadas, el rodillo de Ilunion hizo el resto. Con 75-62 a falta de cinco minutos el partido estaba decidido porque los albacetenses ya no tenían capacidad de reacción. Ilunion volvía a ser la bestia negra para el Amiab en su torneo maldito y se hacía con la Copa del Rey por 78-71.