En la mañana de ayer, el alcalde, Juan Ramón Amores y el concejal de Deportes, Javier Escribano, visitaron las obras de sustitución del césped artificial del campo de fútbol Nuevo Maracañí.
Además de renovar el césped, también se ha sustituido la tubería de riego del campo de fútbol 11, además de otras reparaciones en el campo de fútbol 7. Escribano adelantó que las obras podrían estar terminadas a finales de la próxima semana. «Estamos muy contentos con los trabajos que está realizando la empresa porque llevan un ritmo mucho mayor del que estaba previsto». De esta manera, el campo estará disponible la primera semana de agosto, cuando comenzarán a jugar los equipos juveniles y los dos equipos de Preferente.
El césped y el caucho retirado van a ser reutilizados, lo que supondrá un ahorro de 15.000 euros para las arcas municipales. El césped se reciclará en las bandas, donde también se ha desplazado el vallado para su ampliación. Esta zona de seguridad, hasta ahora de hormigón, se convertía en una pista de patinaje con los tacos. Otra parte de este césped artificial se reutilizará en el campo de césped natural, también en la zona de bandas, actualmente de tierra. El resto se instalará en la pista deportiva de La Goleta y se está barajando donde colocar el césped que sobre.
Subvención
El alcalde anunció que el Ayuntamiento ha solicitado una subvención que de ser concedida supondrá el 50% de la inversión que asciende a 215.000 euros.
Las obras comenzaron el pasado 8 de julio, con un plazo de ejecución de seis semanas que podrían ser cuatro o cinco si las obras marchan a este buen ritmo.
Pedro Martínez, director de la Escuela de Fútbol Base, mostró su alegría por las mejoras que están llevando a cabo en esta instalación deportiva, sobre todo, «teniendo en cuenta el ascenso del equipo juvenil a categoría nacional».