«'Me piden que regrese' es una novela de amor y aventuras»

Antonio Díaz
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Popular Libros acogerá el martes, a las 19 horas, la presentación de Me piden que regrese, de Andrés Trapiello. El escritor comentó a La Tribuna de Albacete distintos aspectos sobre su nueva novela, ambientada en el Madrid de los años 40.

Andrés Trapiello, escritor. - Foto: Carlos Ruiz

Popular Libros acogerá el martes, a las 19 horas, la presentación de Me piden que regrese, de Andrés Trapiello. El escritor comentó a La Tribuna de Albacete distintos aspectos sobre su nueva novela, ambientada en el Madrid de los años 40.

De nuevo Madrid está presente en su obra.

Madrid es parte importante de la trama, porque como sabe todo el mundo, pasan muchas cosas, pero no solamente por eso, ya que Madrid es también espejo de muchas partes de España y, sobre todo en este caso es un escenario equivalente a Francia, Estados Unidos, Inglaterra. 

¿Por qué?

La novela es una trama de aventuras y las aventuras y el espionaje están en todas partes, más en ese momento en Madrid, en 1945, que era un nido de espías. Lo exigía el guión tenía que ser en Madrid y no en otra parte.  

Con la guerra mundial a punto de terminar y pendientes del Régimen. 

Es una novela que no es política, no es ideológica, no es una novela histórica, ni muchísimo menos. Me piden que regrese es una novela de amor y aventuras, que suceden en un momento muy novelesco, al final de la guerra mundial. En España el Régimen estaba muy agobiado por ese final, porque había apostado por Alemania, que estaba perdiendo la guerra y le convenía acercarse a los ganadores, a Estados Unidos y a Inglaterra, que querían que España sirviese a sus intereses. Ahí empieza la novela, cuando Estados Unidos pide que regrese a un español exiliado, que ha pasado los últimos 10 años refugiado. Le piden que vuelva para quitar de en medio un estorbo muy grande para su política de acercamiento a Franco, un militar español. El protagonista, Benjamín Smith, viene a hacer el trabajo. 

¿Una novela distinta?

Esta es la novela que he querido hacer siempre, sobre la reconciliación de verdad de las dos Españas. Yo necesitaba dos personajes que representaran a las dos Españas. Por un lado, este personaje que regresa a Madrid, que es un hombre, un gitano, hijo de la inclusa de Madrid, de origen humildísimo, pero enormemente inteligente, con muchísima capacidad para salir adelante; es un hombre muy guapo, también. Ella, es todo lo contrario, una mujer muy rica, hija de un conde, de la aristocracia madrileña. Es importante, ambos han padecido los horrores del otro bando, son víctimas del bando contrario. Son dos personas que entienden el dolor del otro y, además, son víctimas. Son dos personas libres, por eso es una novela de amor. 

¿Es la novela que siempre quiso escribir, por esa reconciliación de la que habla?

A mí me gustan las novelas de amor, de aventura y para todos los lectores. Siempre me han gustado los autores que tratan al lector como una persona adulta y el lector de esta novela así lo ha considerado. Es una novela dialogada, que todo el mundo puede entender, pero también que, digamos, va a poder leer todo lector, sin pensar en su edad, clase social, ideología o ideas. La ficción, al contrario de lo que ocurre con la historia, es el lugar del entendimiento, donde los lectores dejan a un lado todo lo que son, se zambullen en un ambiente, en un clima, para dejarse convencer  y emocionar, por eso es la novela que he querido hacer siempre, con un tema que, tradicionalmente, en la literatura española, ha sido de buenos y malos. Esta es una novela para que la lea todo el mundo, porque el autor no les va a decir nada, no es una novela de propaganda. 

Aparecen todos los ambientes del Madrid de la época. 

Sí, Paspoga, Palace, el Ritz, Embassy, los grandes modistos, los toros, Manolete, la aristocracia, cenas de embajadores, pero también aparece el Madrid del hambre, la miseria, el estraperlo, las corralas, del trabajo y de la gente a la que no llega el dinero a fin de mes. Es la novela del cine, donde se reúnen los dos mundos. Todo el mundo necesitaba para salir adelante, de la imaginación, la fantasía y la evasión que les daba el cine. 

Cultiva todos los géneros. ¿Alguno en el que se siente especialmente cómodo?

Cómodo no es la palabra, un escritor tiene que estar incómodo en todo, tiene que sacar de sí mismo lo mejor, aquello que se resiste a salir. Siempre está en tensión, da igual el género.