Julio A. Virseda Rodríguez, doctor en Urología, intervino en el ciclo de conferencias de Aluex, en el salón de actos de la Diputación Provincial. El doctor Virseda habló sobre El amanecer de la cirugía y comentó a La Tribuna de Albacete algunos aspectos de interés sobre su charla. 

La curación camina a la existencia humana...

Siempre ha habido heridos, bien por accidentes de caza o los provocados por el propio hombre, con lo cual la cirugía  y el cirujano, en épocas prehistóricas acompaña la vida del hombre desde sus principios. Siempre ha habido un hombre o una mujer seguramente, con el ánimo de cuidar al herido o traumatizado, llámese médico, cirujano, chamán prehistórico, pero siempre ha habido. 

Incluso el hombre primitivo, parece, que se atrevió a hacer trepanaciones craneales. Efectivamente, las trepanaciones craneales se remontan a 15.000 años atrás. Con una curiosidad importante, se comprueba que aquellas personas trepanadas, parte de ellas, sobrevivieron, porque  que el hueso de la trepanación está perfectamente cicatrizado, luego fue una cirugía exitosa que permitió la supervivencia, de forma que las trepanaciones se han repetido, de manera distinta, claro, hasta el presente, con los neurocirujanos. 

¿Los primeros instrumentos  que manejaron fueron de piedra?

Sí, los primeros instrumentos  fueron de pedernal o de obsidiana, que son elementos que se pueden afilar de una forma muy eficaz. El cobre, el bronce y el hierro vendrían después, pero el hombre, en principio, utiliza para todas sus necesidades, las que sean,  lo que tiene a mano y es la piedra, la obsidiana.  

¿Cuándo podemos hablar de cirujanos como tales?

La historia de la cirugía, realmente, tiene un período de evolución muy corto, 200 años nada más, con hitos importantes, cuando se descubren y se ponen a disposición de ella la anestesia  o la lucha contra los gérmenes y la infección quirúrgica y eso se produce en la mitad del siglo XIX, como tal, seria, firme, efectiva, no tiene más allá de 150, 200 años, pero el cirujano se remonta a épocas antiguas y ya los vemos en Grecia o en Roma. Ahora, podemos definir a la cirugía actual la que se desarrolla a partir de la primera Guerra Mundial.

Lamentablemente siempre ha habido guerras e imagino que la cirugía sí ha mejorado por los conflictos. 

Claro, hasta el presente. Siempre se ha dicho que si quieres ser un buen cirujano, solamente has de hacer una cosa,  seguir el camino de los ejércitos. Que yo sepa, es la única ventaja que aportan las guerras, la única, las demás sólo son fracasos, pero sí que hace avanzar el conocimiento médico y, sobre todo quirúrgico, es el único beneficio que se puede atribuir a las guerras. Por desgracia, lesiones, traumatismos, fracturas, va de la  mano de los episodios de  guerra. Lamentablemente, las lesiones quirúrgicas van a seguir siendo producidas por el propio hombre y mientras exista en la tierra habrá lesiones que necesitan tratamiento quirúrgico.  

Las nuevas técnicas, robótica, incluso inteligencia artificial, ¿abren un campo especialmente brillante?

Sin duda, la cirugía robótica, lo último del progreso quirúrgico, el robot opera porque lo maneja un hombre, de forma distinta a como era tradicional, pero la maneja un cirujano. La máquina no opera. Se puede prever la posibilidad  futura, ya prácticamente en marcha, de operar un paciente de un Continente a otro, puede operar en Albacete un cirujano que esté en Houston, Texas, o al contrario.

Lógicamente, con cirujanos presentes en ambos escenarios o ciudades. 

Cierto, no se trata sólo de mandar las órdenes por la vía que corresponda, sino que un cirujano donde esté se comunica con otro que está junto al enfermo. El robot sólo no se maneja, recibe órdenes, más o menos distantes o complicadas, pero siempre la máquina está a las órdenes del hombre. Con la inteligencia artificial igual, siempre habrá una inteligencia humana que controle.