La Fundación Secretariado Gitano dio cuenta del Programa Calí , por la igualdad de las mujeres gitanas, que busca la integración sociolaboral de este colectivo, a través del fomento de la igualdad de oportunidades, de la igualdad de género y la lucha contra toda forma de discriminación. Se trata de un programa que se puso en marcha en 2016, que ha atendido a más de 4.600 mujeres en las 14 comunidades autónomas en las que se ejecuta, entre ellas, Castilla-La Mancha, donde llegó a 700 mujeres, unas 150 de la ciudad de Albacete.
Este programa, que en la región se desarrolla en Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Talavera, ofrece a las mujeres gitanas "la posibilidad de formarse, de encontrar su proyecto de vida, de encontrar un empleo" y así ha sido desde que se inició. "Muchas consideran que no son capaces, que no tienen tiempo y que no saben cómo hacerlo", declaró la coordinadora estatal del Programa Calí, Pepi Fernández, que dijo que las técnicas que trabajan en este proyecto se encargan de llevar a cabo itinerarios individualizados y grupales que les ayudan en su desarrollo personal, las preparan para participar en procesos de inserción laboral y fomentan su ciudadanía activa.
El programa está consiguiendo que uno de los grupos más vulnerables de la sociedad, las mujeres gitanas, avance en la consecución de su derecho a la igualdad. "Es un programa eficaz y eficiente que responde a las necesidades de las mujeres gitanas", destacó Fernández, indicando que se seguirá desarrollando porque "todavía hay muchas mujeres gitanas que nos necesitan".
En el acto de presentación de los resultados e impacto del proyecto, que se realizó en la Casa Perona, dieron la bienvenida el director autonómico de la Fundación Secretariado Gitano en Castilla-La Mancha, Carlos Ruiz; la delegada provincial de Igualdad, Lola Serrano, y la concejal de Calidad de Vida y Participación, Llanos Navarro.