La Confederación del Segura da una de cal y otra de arena: Hellín deja de estar en situación de sequía extraordinaria, pero las restricciones al regadío siguen vigentes, al menos hasta la celebración de la próxima Comisión de Sequía de la CHS prevista para este mes.
En marzo, se declaró en situación «extraordinaria» la zona de la cuenca denominada como UTE Uno. Ésta incluye los abastecimientos de la ciudad hellinera, que coge el agua del Canal de Riegos de Hellín, que a su vez las toma del río Mundo, además del refuerzo de los sondeos del Boquerón.
A causa de esta declaración, se ordenó la reapertura progresiva de la Batería Estratégica de Sondeos, empezando por la zona de Calasparra, así como la flexibilización de los caudales ecológicos. En esta primera fase, los pozos hellineros de la BES no se activaron.
Mes y medio más tarde, la Comisión de Sequía de la CHS decidía levantar la declaración de sequía «extraordinaria», a causa de las lluvias caídas en la Cabecera entre finales de marzo y principios de abril, además de las aportaciones del Trasvase Tajo-Segura.
Prudencia. No obstante, el organismo de cuenca opta por la prudencia y, en una nota oficial, precisa que se mantienen las restricciones al regadío tradicional y no tradicional de un 25%. En cuanto a los pozos, se «suspende» su puesta en servicio, pero sólo de forma provisional.
De hecho, la Confederación recuerda que se pueden poner de nuevo en funcionamiento «si la situación en la demarcación del Segura volviera a sufrir un cambio de situación que sugiriera su activación, lo que podría suceder en un par de meses».
En la actual situación, indica, los abastecimientos «están garantizados hasta el final del año hidrológico 2023-2024», esto es, hasta el 30 de septiembre, pero todavía es preciso «minorar los consumos de regadío» durante todo lo que queda de campaña.
Para ello, la Comisaría de Aguas realizará en las próximas semanas un plan de control efectivo de los aprovechamientos, para garantizar a final del año hidrológico un volumen mínimo en los embalses, que permitan un inicio del año hidrológico 2024-2025 «con garantías».
La margen izquierda. Cabe recordar que en la Comisión de Sequía de la CHS también se aprobó la declaración de situación «extraordinaria» por sequía a la zona conocida como UTE Ríos de la Margen Izquierda, de la que forman parte varios municipios de la provincia de Albacete.
Entre esos municipios, se encuentran los términos municipales de Liétor, Montealegre del Castillo, Albatana, Alcadozo, Corral Rubio, Fuente Álamo, Ontur, Pétrola y Tobarra, según se detalla en el Plan Especial de Sequía vigente.
En estos términos municipales, se aplicará una restricción similar a la que se aplica en la UTE Principal, pero de menor cuantía ya que los consumos son menores en esta zona. Si en los regadíos de la UTE Principal se aplica un 25%, aquí será del 15%, según se adelantó al término de la Comisión.
Las aportaciones del travase. Al término de la Comisión de Sequía, el presidente de la CHS, Mario Urrea, advertía la «falsa sensación de seguridad» que se vive en la Demarcación, a causa de las aportaciones del Trasvase Tajo-Segura.
En una comparecencia ante los medios, remarcó que «hay que mantener las restricciones» en la UTE Principal, porque «hay una falsa sensación de seguridad hídrica, porque las aportaciones del Trasvase hacen que el indicador de sequía mejore mucho».
Sin embargo, los problemas de consumo se mantienen, hasta tal punto que reconoció que «si no hay contención en el consumo, el escenario que nos podemos encontrar a finales del año hidrológico puede ser muy complicado».
De hecho, a pesar de las restricciones del 25%, «se está consumiendo como en el estado de normalidad» por lo que se han dado instrucciones a la Comisaría de Aguas para que adopte las medidas necesarias para garantizar el cumplimiento de las limitaciones.