Liz Lobato, directora y guionista, pasó por Abycine para presentar Tierra de nuestras madres, en el cine Capitol, con posterior coloquio con el público.

En su larga trayectoria ha dirigido cortometrajes como La quela, …cuando truena, Danzantes o Padres. También ha realizado una serie de cortometrajes documentales en el ámbito rural, Lindes y Parajes y  rodó Tierra de nuestras madres, que  tuvo su estrenó en el Festival de Málaga.

La directora comentó a La Tribuna de Albacete sobre su presencia en Abycine que «una no elige los festivales, los festivales te eligen a ti, entonces yo voy a Abycine porque es Castilla-La Mancha, porque es mi tierra, porque es la tierra de las madres de la película y es donde tiene que estar».

La realizadora castellano-manchega, de Villacañas, indicó que Tierra de nuestras madres es una película que tiene mucho que ver con nuestras raíces, claro «con las raíces y por la falta de raíces, por el desenraizamiento al que nos someten o nos sometemos».

Recordó la realizadora y guionista que «llevo desde el 2005 haciendo cortos de cine comunitario en mi pueblo, el 90 por ciento, en blanco y negro. Después de cuatro cortos de ficción, dos de documental que son el inicio de una serie sobre la tierra, incluso antes de comenzar esta serie, escribo una historia de la tierra, de gente a la que quieren quitar sus raíces y que dejen a sus muertos abandonados. Una historia de gente joven que se somete y gente mayor que recuerdan lo que es luchar por luchar, sin tener que ganar, sólo por dignidad y así surge».

Es también una película en blanco y negro, como subrayó Liz Lobato, porque «la vida en La Mancha es bastante en blanco y negro,  luego en Feria se viste de colores, pero durante el año, ya que el campo es muy extremo, es muy extrema en Castilla-La Mancha la misma vida; hay un clima extremo, un terreno extremo y extremo es el blanco y negro».

La película Tierra de nuestras madres ha dado ya grandes satisfacciones a Liz Lobato y lleva cosechados muchos premios, entre ellos, comentó la realizadora, «hace poco al actor Saturnino García le acaban de dar otro premio, como mejor actriz. Es un actor como la copa de un pino y se animó a hacer esta película, en la que interpreta a Rosario y, además del premio en Málaga, le han dado el premio a la mejor actriz, porque hace un papel maravilloso, de la tierra, un papel de señora manchega de toda la vida, la madre de todos».

Esta película también está impregnada del espíritu de Amanece, que no es poco, de José Luis Cuerda. En este sentido, la realizadora dijo que, «cómo no, por Dios, cómo no beber agua cuando hay sed. Me ha influido, no sé cómo y no sé cómo me hidrata el agua que bebo,  pero me hidrata. Es como un subsuelo, como un sustrato».         

fábula. Como apuntó la realizadora, la película, más que una fábula, «es un cuento chino, pero es verdad que tiene algo de fábula, porque es el animal el que cuenta, por qué no, es también una fábula»

La película de Liz Lobato lleva ya una espléndida andadura, una de sus producciones más exitosas, que tendrá un recorrido internacional por distintos festivales, que completarán el recorrido de Tierra de nuestras madres. Además, siempre hay proyectos y, como explicó Liz Lobato, «tengo el próximo proyecto ya escrito y en manos de productoras. También dirigiré yo, claro». 

Un paso por Abycine que disfrutó el público en la sala Capitol y desde luego pudo conversar con la propia realizadora, Liz Lobato, que contó distintos aspectos de interés sobre el proyecto, una película que tiene como punto de partida la localidad de la propia realizadora, Villacañas, donde ella ha rodado también sus cortos.