La Travesía de la Almenara y Los Gallineros resulta un éxito

Redacción
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La prueba tenía un recorrido de cerca de 35 kilómetros de distancia, entre la jornada del sábado y del domingo, con una dificultad técnica muy alta

Fotografía de familia de los participantes a esta travesia. - Foto: La Mancha Press

Este sábado, día 28, y el domingo, 29 de septiembre, tuvo lugar la segunda de las dos pruebas extraordinarias de fin de semana, con pernoctación, al margen de las 46 pruebas de la XI Edición de las Rutas de Senderismo de la Diputación Provincial de Albacete. Una prueba dividida de dos etapas, otra vez, un éxito. Un recorrido de cerca de 35 kilómetros de distancia, entre las dos jornadas, con una dificultad técnica muy alta.

El sábado, los senderistas, con casi 16 kilómetros por delante, partieron del Cortijo de Tortas pedanía de Paterna del Madera. Con un poco de frío a primera hora, cogerían una pista dirección suroeste varios kilómetros, pasando primero por las ruinas del cortijo Jeromo, dejando a mano izquierda otra pista que va a Las Hoyas del Pino. Y después por el cortijo Quinquillero.

Abandonarían este camino para girar a la izquierda y coger una preciosa senda por el Barranco del Ciervo, irían ascendiendo poco a poco, rodeados de una frondosa vegetación, predominando unos grandes ejemplares de acebo y escuchando el murmullo del agua bajar. Llegarían a la fuente y al mirador Barranco del Ciervo, con unas preciosas vistas, desde donde pudieron contemplar La Almerara, principal objetivo de su marcha.

Subieron un poco más hasta lo alto de la Cuerda Larga, buscando una de las dos casetas forestales que hay en este alto, la de la derecha, junto enfrente de su destino. Lugar que aprovecharon para almorzar, con sol, aunque debido a la altura el aire venía fresco.

Comenzarían, con energía renovada, el descenso hasta la Fuente del Pino de los Muchachos, en la base misma del pico, a la que también se puede llagar en coche. Desde este punto ascendieron a uno de los picos más conocidos de la Sierra Albaceteña, el de La Almenara, con 1.796 metros de altitud sobre el nivel del mar. La subida es un tanto complicada debido a que el desnivel es alto y por lo escarpado de las rocas, especialmente en su parte final, teniendo que extremar las precauciones al ascender.

Tras solventar estas dificultades, llegaron a la cima, con el cielo totalmente despejado, lo que permitía disfrutar de unas fantásticas vistas, el Calar del Mundo y la Sima, con sus picos como el Mentiras y el Argel, que fueron los protagonistas en la anterior travesía, y un poco más cercanos, otras cumbres como el Padroncillo, El Cambrón y La Sarga.

Tras las fotos de rigor, los participantes comenzarían el descenso, que siempre es más complicado que el ascenso. Llegarían de nuevo a la fuente de los Muchachos, para coger desde este punto una bella senda, dirección a Riópar, por la GR 66, que abandonarían un poco antes de llegar a la zona recreativa de la Fuente Grande, con bancos y mesas de madera, y con una preciosa fuente, igual a las que se pueden ver en distintos sitios de la Sierra de Albacete. Aquí aprovecharon para comer.

Arrancarían de nuevo por pista, hasta llegar a la cantera que hay cerca de Riópar, para coger entonces la senda del Chorreón, que les conduciría hasta la pedanía de El Gollizo, donde sólo les restaba seguir descendiendo a Riópar, donde finaliza su primera etapa.

Tras el merecido descanso, ya el domingo 29, los senderistas partirían sobre las ocho de la mañana hacia la aldea de El Gollizo, para comenzar la marcha a pie de esta segunda etapa, con cerca de 18 kilómetros de recorrido. La niebla se veía en lo alto de la sierra, aunque conforme estos iban ascendiendo desaparecía.

Cogerían aquí una senda suave hasta llegar a la Toma del Agua, una zona muy activa turísticamente por sus recursos naturales y por la existencia de numerosos arroyos y fuentes, llegando a una zona acondicionada para campamento juvenil de idiomas, muy bien acondicionado, con una preciosa fuente e incluso un pequeño lago, con distintas cabañas de madera y demás instalaciones deportivas.

Desde este punto la cosa se ponía más seria, ya que el desnivel aumentaría, así que con paso firme, aunque constante, tras unos kilómetros de subida por senda, llegarían al paraje de los Pelados, donde también por senda tras girar a la izquierda llegarían a uno de los árboles más singulares de la provincia, el Pino Gordo del Toril, pino laricio de gran envergadura, lugar que aprovecharon para almorzar bajo su gran sombra.

Continuarían la marcha subiendo al collado de los judíos, para, girando a la izquierda, ascender al alto del pico Gallinero, con una altitud de 1.629 metros de altitud sobre el nivel del mar y unas vistas impresionantes del Parque Natural Calares del Mundo y de la Sima y de los picos más conocidos de la zona, incluido el ayer coronado, como es La Almenara.

Descenderían un poco para ir cresteando por la conocida como la cuerda de Los Gallineros, con fantásticas vistas, hasta llegar a la altura del cortijo del Malojar donde descendieron hasta el mismo cortijo, cogiendo aquí una senda hasta fuente cerezo y cortijo de la limonera, enlazando ya con una pista que les conduciría de nuevo a El Gollizo donde daría por concluida la etapa de esta fantástica travesía.

Inmejorable, extraordinaria y exigente travesía, con una temperatura ideal para el senderismo, que hizo disfrutar a los 35 participantes de esta actividad de las maravillas de entornos naturales que esconden nuestros municipios, gracias a esta iniciativa puesta en marcha por la Diputación Provincial.