Una vez cumplimentados los trámites preceptivos que recoge la Ley de Contratos del Sector Público, se confirma el cambio de empresa concesionaria del servicio de ayuda a domicilio en Albacete y sus pedanías, cuya nueva adjudicación ya había obtenido la aprobación de la Junta de Gobierno Local hace algo más de un mes.
Como ya informó La Tribuna, la empresa propuesta es OHL Servicios Ingesán, con una propuesta económica de 6.982.000 euros por tres años, un coste anual de algo más de 2,3 millones que se sufraga con las aportaciones del Gobierno regional y el Ayuntamiento, tal y como establece el Plan Concertado de Servicios Sociales, complementadas con una aportación del usuario que depende de su situación socioeconómica. Tras ser considerada su oferta como la más ventajosa de las cinco presentadas en la licitación, la mencionada mercantil sustituirá en esa prestación a Sacyr Social, que no concurrió al procedimiento abierto.
La magnitud del servicio, de apoyo a personas mayores y dependientes en sus domicilios, lleva a cifrar en unas 120.000 horas anuales las que se presta su personal. Este lo componen 115 personas, en su mayoría auxiliares que se desplazan a las viviendas de los usuarios, que la nueva empresa se deberá subrogar, de acuerdo a las condiciones del contrato.
Tal y como establece el pliego de condiciones, el servicio de ayuda a domicilio se considera una prestación social básica del sistema público de Servicios Sociales que constituye un conjunto de intervenciones profesionales, de carácter preventivo y rehabilitador, que tiene por objeto atender las situaciones de dependencia ya sean laborales, económicas, educativas, sanitarias, personales y sociales, que dificulten que la persona o unidad familiar pueda desenvolverse con autonomía en su domicilio y entorno habitual, favoreciendo las condiciones necesarias que hagan posible la permanencia en su medio habitual de convivencia en condiciones adecuadas.
Las prestaciones básicas del servicio incluyen tareas de atención personal, como ayuda del personal para el aseo e higiene personal, cambios de ropa, ingesta de alimentos, movilización con o sin apoyos familiares, control sanitario (como el de la toma de medicación prescrita) y atención psicosocial.
Además, el servicio también ofrece tareas de carácter doméstico, relacionadas con el mantenimiento y limpieza de la vivienda, o de carácter socio-comunitario, como el acompañamiento para realizar gestiones o para asistir a servicios de estancias diurnas.