Las imágenes que remarcan en las procesiones de la Semana Santa el Misterio de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús este año limitaron la expresión en la calle como consecuencia de la climatología adversa.
El lamento generalizado de cofrades y hermanos predominó los días que precedían las celebraciones de las procesiones amenazadas, generalmente, por la lluvia a excepción del Domingo de Ramos, el Prendimiento de Jueves Santo, el Encuentro en Santa María la jornadad de Viernes Santo y la procesión del Silencio desde la parroquia de San Blas.
Los cultos y actos religiosos en las parroquias y los conventos concentraron a la mayoría de los fieles y devotos en la liturgía, culto y celebraciones religiosas en torno al Misterio de la Pasíón, Muerte y Resurrección de Jesús.
La liturgia y el culto distinguieron la Semana Santa La Junta de Hermandades de la Semana Santa de Villarrobledo, este año presidida por la cofradía del Santísimo Cristo de las Injurias (Moharras) y Nuestra Señora de las Angustias, cerró el programa festivo con la celebración de la Resurrección de Jesús en la Eucaristía de las parroquias de San Blas, Santa María, San Sebastián y la ermita de la Soledad.
La generosa lluvia primaveral impidió la celebración de la tradicional procesión en la plaza de Santa María de la Santísima Virgen con su Hijo Resucitado.
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