El delegado provincial de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural en Albacete, Ramón Sáez, ha entregado los títulos de propiedad de 114 parcelas de la concentración parcelaria privada de Yetas, que afecta a cuatro polígonos de Nerpio y uno de Yeste, en el Ayuntamiento de Nerpio junto al alcalde de Nerpio, José Antonio Gómez.
La entrega se ha llevado a cabo en el Ayuntamiento de Nerpio, donde Ramón Sáez, acompañado por el alcalde local, José Antonio Gómez, ha destacado el compromiso del Gobierno regional con las concentraciones parcelarias, y "prueba de ello es que en el año 2021 se publicó el Decreto 67/2021, de 1 de junio, por el que se regulan los procedimientos de concentración parcelaria en Castilla- La Mancha, tanto públicas como privadas", ha informado el delegado.
Sobre este asunto, Sáez ha explicado que la concentración parcelaria de Yetas ha recibido una subvención de 37.507 euros, de la que se benefician 19 agricultores, 114 parcelas y un perímetro de 3.654 hectáreas, a lo que ha añadido que "antes de acometer dicho proceso de concentración parcelaria existían 587 parcelas, por lo que se ha conseguido aumentar la superficie media de la parcela de 5,65 hectáreas a 29 hectáreas, además de reducir el número medio de parcelas por propietario de 32,6 a 6 parcelas".
En este sentido, el delegado provincial de Agricultura ha puesto en valor la importancia de las concentraciones parcelarias para el sector agrario, en términos económicos, sociales y medioambientales. "La concentración parcelaria conlleva la mejora de la rentabilidad de las explotaciones, aumenta la posibilidad de diversificar producciones, mejora el ahorro energético y la calidad ambiental, así como, facilita la incorporación de jóvenes al sector agrario", ha expuesto.
Al mismo tiempo ha explicado que la iniciación del procedimiento de concentración parcelaria debe estar motivada por la excesiva dispersión parcelaria, la implantación de nuevos regadíos o la consolidación y modernización de los ya existentes; o con el fin mejorar el rendimiento económico de las explotaciones agrarias.
Por su parte, los agricultores de la Asociación para la Concentración Parcelaria de Yetas han explicado que antes del proceso de concentración parcelaria el tamaño de las parcelas agrícolas era reducido y tenían una gran dispersión, y como consecuencia, los jóvenes no podían incorporarse a la agricultura, no se podían desarrollar nuevos cultivos que requerían mayores superficies para su rentabilidad o para su mecanización, además del excesivo tiempo de trabajo que tenían que dedicar a las labores agrícolas. Es por ello que han agradecido el apoyo económico y técnico prestado a los representantes de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha.