La calidad de vida de los mayores de la región se sitúa en un 7,87 de nota sobre 10, según un estudio del Observatorio de Intangibles y Calidad de Vida (OICV) de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) por encima de la media nacional, que se encuentra en el 7,63.
El informe 'Así es nuestra calidad de vida y felicidad social. Retos: edadismo y soledad no deseada 2020-2024' analiza diversos indicadores de bienestar y posicionan a Castilla-La Mancha en la cuarta posición del ránking de calidad de vida y felicidad social de las personas mayores.
Durante la presentación en la consejería, García Torijano ha remarcado que los datos «confirman que estamos en el buen camino, pero también nos señalan los retos en los que debemos seguir trabajando para mejorar aún más la calidad de vida de nuestros mayores».
En este sentido, casi la mitad de los mayores de Castilla-La Mancha, concretamente el 48 por ciento, hacen uso de la red de 53 centros que gestiona la Junta, con más de 125.000 socios y un 31 por ciento de la red de infraestructuras residenciales y otros recursos para mayores.
En la valoración de los servicios sociales, Castilla-La Mancha se encuentra en la sexta posición entre las comunidades autónomas de España, estando por encima de la media nacional. Destaca en el ámbito de los servicios esenciales, siendo la región líder en Teleasistencia Avanzada, con más de 78.500 usuarios y un sistema digitalizado al 95 por ciento. Además, el programa 'Sepap MejoraT' ha alcanzado 7.500 plazas en más de 350 municipios y el servicio de Ayuda a Domicilio atiende a 38.800 beneficiarios.
Estos datos, entre todos los que maneja el OICV, «nos sitúan en el tren de cabeza» del país, según García Torijano: «La calidad de vida de nuestros mayores es fundamental en nuestra comunidad autónoma y lo demostramos cada día en todas las políticas en las que trabajamos y que llevamos a cabo. Estos datos no son fruto de la casualidad, sino que son fruto de un compromiso adquirido por parte de un gobierno y también de un compromiso como sociedad».
Soledad no deseada y edadismo. El informe también revela algunos desafíos para el Gobierno regional, como solventar la soledad no deseada y el edadismo marcado por la brecha digital. En la actualidad, hay más de 404.000 personas mayores de 65 años en Castilla-La Mancha, de las que un cuarto vive en situación de soledad, siendo el 70 por ciento de ellas mujeres.
El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la consejería de Bienestar Social, aborda esta situación en la Estrategia contra la Soledad No Deseada, en la que incorpora 58 medidas para detectar, prevenir y actuar frente a esta cuestión.
Las iniciativas más destacadas son la ampliación de programas de acompañamiento a personas mayores y la promoción de actividades comunitarias que favorezcan la integración y el bienestar emocional de las personas mayores.