La campaña especial de control y vigilancia sobre el transporte escolar que se desarrolló durante la semana pasada por parte de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, con el apoyo de las policías locales, deja 19 denuncias.
En concreto, la Agrupación Provincial de la Guardia Civil controló a 48 vehículos, de los que fueron denunciados 10, que en total acumularon 16 denuncias. Entre las principales cuatro sanciones fueron por tener en un lugar visible la autorización especial para circular con un transporte escolar; dos por seguro de responsabilidad civil; una multa era relativa al acompañante; otra sanción más fue por manipulación del tacógrafo y ocho multas más fueron debidas a otras causas relacionadas con la campaña especial.
Por su parte, la Policía Local de Albacete controló a 31 autobuses escolares a su llegada o salida de la capital, y los agentes de este cuerpo pusieron tres denuncias, dos de ellas relativas a puertas de servicio y emergencias y otra más por la señal de transporte escolar.
Según datos de la Jefatura Provincial de Tráfico la flota autobuses dedicado al transporte de menores en la provincia de Albacete está integrada por 30 vehículos, que son los que se ocupan de las 111 rutas escolares para traer a los alumnos a los centros educativos de la capital, fundamentalmente centros de Secundaria, y regresar a sus domicilios una vez finalice la jornada lectiva en los centros, de un total de 448 autobuses censados.
Durante el desarrollo de este dispositivo especial, del que se han programado otros dos más a lo largo de este año, los agentes han intensificado las labores de inspección de este tipo de vehículos que transporta menores, comprobando aspectos como la documentación relativa a las autorizaciones necesarias para la prestación del servicio, así como del propio vehículo en relación con sus condiciones técnicas y elementos de seguridad. También se prestó especial atención al conductor profesional, su habilitación y permiso de conducción, así como si respetaba o no sus tiempos de conducción y descanso; y se vigiló que los menores fueran correctamente sentados y que hicieran uso del cinturón de seguridad, ya que desde octubre de 2007 es condición imprescindible para la matriculación de este tipo de vehículos que lleve instalados los sistemas de retención individuales, teniendo en cuenta que nueve de cada 10 lesiones infantiles graves o mortales podrían haberse evitado con el correcto uso de este elemento de protección.