Con un carácter rompedor y un diseño contemporáneo, el nuevo Microlino pretende convertirse en el buque insignia de la micro movilidad. El modelo se sustenta en una fórmula digital y flexible que sitúa al consumidor como protagonista y que persigue la excelencia en la experiencia de usuario. Basado en la inteligencia de los datos para ofrecer el mejor servicio, la marca es capaz de ofrecer una visión transformadora de la movilidad adaptada a las necesidades de los usuarios.
Nacido en Suiza, producido en Turín y comercializado tanto en España como en Alemania de la mano de Astara, el Microlino es un vehículo eléctrico biplaza con 230 litros de maletero, una velocidad máxima de 90 km/h, 177 km de autonomía, y que puede circular por cualquier tipo de vía, incluyendo autopistas y autovías.
Los clientes pueden elegir entre el acabado Dolce, con un toque retro, o el Competizione, con una apariencia modernista. Ambos cuentan con faros LED, techo solar, detalles cromados, volante de cuero vegano y doble pantalla.
Microlino, eléctrico ligero y sostenible Su carrocería de aluminio ligera con puerta de acero reforzado y suspensión independiente en las cuatro ruedas mejoran la seguridad, el comportamiento de conducción y su ligereza.
En definitiva, un vehículo que ha llegado para cambiar las reglas del juego y que se puede convertir en el espejo en donde se va a mirar el panorama de la micro movilidad.