Editorial

La escasez de mano de obra puntual se ceba con el sector de la hostelería

-

De un tiempo a esta parte se ha convertido en un lugar común intentar analizar las verdaderas razones por las que el sector de la hostelería en España tiene tantas dificultades para encontrar personal, algo a lo que no son ajenas ni la capital ni la provincia. Bares, cafeterías y restaurantes de todo el país llevan varios meses sufriendo la paradoja del mercado laboral. Se ofrecen numerosos empleos, sobre todo para la temporada estival, pero no hay candidatos para cubrirlos, y mucho menos para los puestos que requieren alguna cualificación. Esta circunstancia lleva a muchos negocios hosteleros a cerrar durante las vacaciones, sobre todo los establecimientos que desarrollan su actividad en los barrios, que tienen por costumbre bajar la persiana durante los días centrales del mes de agosto. Son conscientes de que la clientela aprovecha esas jornadas para escapar al pueblo o a la playa y no les merece la pena estar todo el día detrás de la barra esperando a que alguien atraviese el umbral para pedir alguna consumición. 

Esta situación laboral de la hostelería tiene un añadido extra en la capital albacetense, que en la recta final del verano  vive la Feria, con una alta previsión de necesidad de contratación, ya que desde el sector de la hostelería albacetense indican que será necesario emplear durante los citados días a unos 3.000 trabajadores entre las diferentes categorías, como camareros o cocineros. Por ello, un año más, resultará complicado encontrar profesionales cualificados para hacer frente a los días de fiestas, sobre todo para los nuevos empresarios, porque «nadie quiere ser profesional sólo durante la Feria, ya que el personal cualificado quiere más estabilidad que 10 días al año», tal y como indican desde el sindicato CCOO.

Es evidente que las circunstancias laborales que rodean a los negocios de hostelería son muy particulares y en muchos casos poco atractivas para los demandantes de empleo. Jornadas laborales que incluyen fines de semanas y festivos, horarios que dificultan la conciliación familiar y salarios modestos son algunos de los lastres que dificultan a los empresarios cubrir las vacantes. Sin embargo, también es de justicia reconocer que en los últimos tiempos se ha avanzado en la mejora de esas condiciones y, desde el sector hostelero albacetense, aseguran que los empresarios cumplen estrictamente con lo que estipula el convenio colectivo de hostelería pactado entre la patronal y los sindicatos. 

La realidad demuestra que serán necesarios más pasos para afianzar el futuro del sector, sobre todo en períodos especiales como pueden ser el verano o las fiestas de las localidades, porque no hay que olvidar que es, y lo seguirá siendo, un pilar estratégico en el PIB de cada provincia, en particular, y del país, en general.