El Patronato del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha (Ayuntamiento, Diputación y Universidad de Castilla-La Mancha) confirmó a Pablo Ferrandis Gotor como   director del mismo. El director  habló con La Tribuna de Albacete sobre esta nueva etapa al frente  de este «museo vivo» que cada vez tiene más presencia en los ámbitos locales, provinciales y regionales. 

Una nueva etapa al frente del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha como director...

Sí, fui confirmado en noviembre y con mucha ilusión de afrontar otros cuatro años. En el Jardín Botánico hemos trabajado con intensidad durante estos cuatro años, pero esa intensidad va impulsada por la ilusión y es lo que queremos mantener en los cuatro años próximos.  

¿Cómo fue esa primera etapa?

Para mí, personalmente, ha sido importantísima, porque defino este período al frente del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha como mi gran aventura profesional. Soy profesor en la Universidad, doy clases de Ecología, soy biólogo naturalista y para un biólogo naturalista, dirigir un buen jardín botánico, como es este de Castilla-La Mancha es una aventura preciosa.  

¿Echa de menos esa presencia en la Universidad?

No, porque sigo teniendo toda mi actividad en la Universidad, no he dejado nada de lo que hacía allí, sino que he sumado a mi trabajo en la Universidad la dirección del Jardín Botánico y esto conlleva un volumen de trabajo muy grande. Podría decirte que, incluso, trabajo en casa los fines de semana, pero lo hago con mucho gusto y sabiendo que es un período de mi vida. Yo sigo dando mis clases, dirigiendo tesis doctorales e investigando en la Universidad. El año pasado, codirigí una tesis, con una compañera, muy interesante y respecto a las clases, las imparto a los ingenieros Forestales y de Montes, en  la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, de Montes y Biotecnología y luego, en la Facultad de Educación, con un perfil de alumno muy diferente, pero es muy bonito también.  

¿Están estrechamente ligadas  las dos facetas, la investigación en la Universidad y la dirección del Jardín Botánico? 

Claro, intento dar una dimensión científica y técnica al Jardín Botánico, porque un jardín botánico, siempre lo decimos es un museo de flora dedicado a la investigación, a la conservación y a la divulgación. Entonces, no sólo la divulgación, sino que intento traer esa dimensión científica y técnica de la Universidad al Jardín Botánico. 

¿Qué líneas seguirá en estos cuatro años al frente del Jardín?

Sobre todo, consolidar lo que empezamos a desarrollar en los cuatro años anteriores. Cuando cogí el testigo del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha era un gran jardín con unas colecciones de plantas fantásticas, consolidadas y era el momento de abrirlo al público en mayor intensidad. Entonces, lo que hemos hecho es ir aumentando la difusión del Jardín Botánico en Albacete, partiendo de esas grandes colecciones que se habían conseguido ya. Luego, hemos ido ganando terreno en esa dimensión científico técnica y tenemos ahí una serie de hitos.  

¿Por ejemplo?

Por ejemplo, en la Asociación Ibero-Macaronésica de Jardines Botánicos, la asociación de jardines botánicos científicos de España y Portugal, ahora mismo estamos en la Junta Directiva, por invitación de la propia presidencia, que realmente se ha fijado en este jardín botánico como  interesante, con un planteamiento innovador. El pasado año recibimos  aquí las Jornadas técnicas de esta asociación y hemos consolidado el Banco de Semillas del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha, a través de un convenio con la Junta de Comunidades, de tal manera que somos el centro de referencia de conservación de genes de flora silvestre  y además hemos ingresado en Genmeda, una red que reúne numerosos centros de toda la Cuenca Mediterránea, de conservación de genes de flora silvestre. Nuestro conservador, Alejandro Santiago, acaba de ingresar en un Panel de Expertos de Horticultura de Jardines Botánicos de la Botanic Gardens Conservation International, la mayor red del mundo de jardines botánicos. Realmente hemos conseguido consolidar, avanzar mucho,  con hechos objetivos, el posicionamiento científico técnico del jardín. Volviendo  a la divulgación, cuando empecé a dirigir el jardín, tenía unos 11.000 visitantes y este año hemos cerrado con 33.000 y creo que aún puede crecer el número de visitantes. Hemos avanzado mucho y lo que me interesa ahora es consolidar ese posicionamiento, para que en estos cuatro años terminemos de perfilarlo.  

¿Qué retos hay, qué le gustaría para el Jardín Botánico?

Un reto importante es el cambio climático. Formamos parte de la Alianza  de los Jardines Botánicos por el Cambio Climático y estamos haciendo ensayos, mediciones sobre cómo el cambio climático puede afectar a la vegetación. Frente al cambio climático, el Jardín Botánico tiene que mandar un mensaje científico, técnico y objetivo de cómo el cambio climático afecta a la vegetación y tenemos que ajustar nuestras colecciones al cambio climático, porque vivimos veranos muy intensos. Otro reto importante es la mejora en la interpretación de las colecciones del jardín. Hemos puesto buena cartelería, pero más allá de eso, como las plantas están ordenadas simulando la vegetación autóctona de Castilla-La Mancha, hay que contar esos hábitat. Es una vegetación valiosa y es muy difícil tener las colecciones que tenemos aquí, plantas rarísimas que cultiva, por cierto, José María Herranz, director científico del Jardín Botánico, profesor de la Universidad, que hace un trabajo increíble. Estas plantas, si no se cuentan bien, no se aprecian. Además, estamos preparando un libro guía del Jardín Botánico, para que la gente pueda comprarlo por poco precio o puede cogerlo al entrar al jardín y dejarlo al salir. Cada página será una guía de las colecciones del jardín y pondremos códigos QR que lleven a ese libro guía.   

¿Cómo invitaría a la ciudadanía a visitar este jardín?

Bueno, diciendo que es un muy buen jardín botánico, desde el punto de vista técnico y advirtiendo también que tenemos unas colecciones de plantas, sobre todo las autóctonas de Castilla-La Mancha, que son la mitad de la superficie del jardín.  Son siete hectáreas y tres y media  están dedicadas a la vegetación autóctona y hay que mirarla con otros ojos, desde luego, es la nuestra, identitaria, con un valor enorme, evolutivo y ecológico.  

¿Cualquier persona puede hacer una visita?

Sí, es entrada libre y gratuita. Se abrió en 2010 y tenemos algunas infraestructuras que necesitan una revisión importante, sobre todo el sistema de riego. Con el parón del invierno, aprovechamos un mes, mes y medio para realizar esos trabajos y esperamos a mitad de febrero volver a reabrir, solucionadas las cuestiones técnicas del sistema de riego, pero las visitas guiadas se mantienen, a puerta cerrada. Seguiremos dando ese servicio. 

Colabora con otras instituciones culturales, ¿seguirá ese camino?

Claro, nuestra intención es hacerlo. Traer actividades artísticas al Jardín  Botánico, por un lado es la celebración del jardín como tal, y luego celebrar la belleza de la naturaleza. Para mí no hay nada de más belleza que la que hay en la naturaleza y ha sido inspiración de todas las expresiones artísticas. Entonces traer arte al Jardín Botánico es elevar al cuadrado la belleza, con lo cual nuestra intención es seguir con ello, siempre y cuando traigamos expresiones artísticas que sean acordes a la idiosincrasia  del jardín. Es otra forma de que la ciudadanía se dé cuenta lo bello que es y que se anime a disfrutar de este Jardín Botánico, que es de todos. 

¿Hay gente que no lo conoce aún?

Supongo que sí, pero otro de los retos para estos cuatro años es seguir consolidando nuestra línea de divulgación del jardín y, por tanto, aumentar la difusión, pero hemos avanzado muchísimo. Otro reto es aumentar nuestra visibilidad en Castilla-La Mancha. Es verdad que vienen grupos y asociaciones de otras ciudades y provincias, eso empieza a ser frecuente, pero nuestra intención es darnos a conocer y culminar la proyección del Jardín Botánico a nivel regional, porque no olvidemos que es de Castilla-La Mancha.  

Tienen unas espléndidas salas de exposiciones y conferencias.

Cierto, un salón de actos con 140 puestos, que permite acoger distintas actividades, compatibles con la esencia de este museo de plantas. Luego, la sala de exposiciones, también está cada vez más ocupada y vienen muchos artistas que se interesan por el jardín. La única condición que ponemos para traer una exposición es que guarde alguna conexión con la naturaleza. Todo enriquece este jardín.  

¿Qué falta?

Tiene que mejorar en algunas infraestructuras. A mí me haría mucha ilusión tener un pequeño edificio en la entrada que sirviera como recepción, tienda y cafetería. Me decía hace poco el director del Real Jardín Botánico de Madrid, que es mi amigo, que no hay jardín botánico que se precie que no tenga una cafetería. Sería muy interesante. 

¿Tienen ya cerrado un calendario de actividades?

Vamos a ir cerrándolo. Celebramos en los dos últimos años con gran éxito el Festival del Jardín Botánico. El año pasado fue espectacular, tanto en la actuación de la Big Band del Conservatorio Superior, con Agustín Lozano, o con La Trova del Llano. También con la Asociación de Amigos del Jazz hacemos algún concierto en septiembre, con mucho éxito. Me gustaría consolidar estas actividades, pero es verdad que aún tengo que hablar con las instituciones patronas para terminar de organizar el programa de 2024. 

De paso, colaborar con otras instituciones y asociaciones. 

Hemos establecido un convenio marco de colaboración con la Universidad Popular de Albacete, que tiene actividades que encajan muy bien con el Jardín Botánico. Tenemos un convenio de colaboración con Cruz Roja y luego, existe una Asociación de Amigos del Jardín Botánico, con la cual interactuamos y nos ayudan a promocionar la imagen del jardín, más allá de las puertas del propio recinto. Pero hay otras muchas asociaciones con las que colaboramos, como la Asociación de Huertos de Ocio y Ecológicos de Albacete (AHOE);  Sociedad Ornitológica de Albacete (SAO);  Arca de Noé;  Asociación de la Gente del Haiku en Albacete (AGHA); o la Sociedad Micológica de Albacete y seguiremos esa línea de colaboraciones.