No tienen un cáncer de mama, pero sí muchas posibilidades de poder desarrollar uno, porque son mujeres portadoras del gen maligno Brca 1 o Brca 2, o tienen una asociación de casos de tumores en su familia, son las candidatas perfectas para pasar por el quirófano y someterse a una mastectomía bilateral profiláctica, es decir, una extirpación de las mamas de manera preventiva. En lo que llevamos de año son ya 11 las mujeres que han dado este paso y se han sometido a esta intervención, que en muchos casos no deja de ser compleja y engorrosa, debido a que las pacientes deben pasar al menos dos veces por el quirófano o incluso más.
Junto a las 11 mujeres intervenidas, a una media de una al mes, hay otras nueve que están a la espera de pasar por esta cirugía preventiva para evitar desarrollar un cáncer de mama realizando de esta forma una hazaña como ya hizo la conocida actriz Angelina Jolie hace unos años.
Sin embargo, esta intervención no exime a las mujeres con altas probabilidades de sufrir este tumor de padecerlo en el cien por cien de los casos, existiendo además el chequeo permanente con controles periódicos como alternativa para aquéllas mujeres que no desean pasar por el quirófano.
Todos estos casos, junto a las nueve mujeres que están a la espera de esta intervención en la Unidad de Mama del Hospital Perpetuo Socorro, son analizados en el comité de tumores que se reúne de manera periódica todas las semanas. Además, estas pacientes por regla general llegan derivadas de la Consulta del Consejo Genético que ha evaluado antes los casos y la necesidad de someterse a este cirugía preventiva.
Como comentó el jefe de la Unidad de Mama del Área Integrada de Albacete, el doctor José Antonio García del Pozo, si bien estas mujeres no tienen un cáncer de mama, casos que sin duda tienen prioridad absoluta, «sí que hay que darles salida porque si se esperan demasiado las posibilidad de desarrollar un cáncer de mama son bastante altas, entre un 60 y un 80%».
La mastectomía bilateral profiláctica implica que la paciente que se somete a la misma se beneficiará de una reconstrucción mamaria inmediata, aunque esto no evitará que la paciente tenga que pasar de nuevo por el quirófano, para completar la reconstrucción, siendo incluso necesario, en algunos casos, una tercera intervención.
Durante la intervención, tras el vaciado de las mamas, a las pacientes se les coloca unos expansores que se van rellenando poco a poco de líquido hasta llegar al volumen de pecho deseado, para en una segunda cirugía colocar las prótesis definitivas a la paciente, un proceso que se prolonga durante varios meses. «Todo dependerá de si se reconstruye el pezón de la mama», según el doctor García del Pozo.
Un tumor incipiente. En los últimos años ninguna de las mujeres que han dado este paso tan importante y que han sido intervenidas por los profesionales de la Unidad de Mama han visto después como desarrollaban un cáncer por el peligro de esas células que a veces quedan en la mama y luego se reproducen. Lo que sí ha ocurrido, como informó el responsable de la Unidad de Mama, «es que en algún caso durante la intervención de extirpación de las mamas, nos hemos encontrado con un cáncer de mama incipiente, con lo cual en lugar de una mactectomía profiláctica hemos realizado una terapéutica».
Lo que también se aconseja a todas estas mujeres con antecedentes familiares de tumor de mama maligno es que antes de hacerse la mastectomía bilateral profiláctica, paso que suelen dar de media a los 40 años, piensen si desean ser madres, con el fin de que de esta forma puedan dar de mamar a sus hijos.