Todas las noches suelen ser tranquilas en la ciudad de Toledo hasta que suenan los teléfonos de emergencias. En este caso, cerca de las 4:15 horas de la madrugada del miércoles al jueves, la Policía Nacional recibió dos llamadas para informar de que se había producido una agresión en el entorno de la plaza de la Magdalena. Las versiones recibidas por el 112 y el 091 eran contradictorias, puesto que una alarmaba de que se habían utilizado armas blancas y otra no.

Sea como fuere, los dos avisos coincidían en la presencia de una persona herida y ensangrentada en el lugar de los hechos. A su llegada, la Policía Nacional se encuentra en la plaza a la víctima acompañada de un segundo varón que, avistando la presencia policial, decide echar a correr de la zona. Su huida propicia una persecución a pie y en coche en dirección la plaza de Zocodover, captando al sospechoso en el entorno de la calle Cervantes.

Se trata de un joven de 18 años que según ha podido saber la investigación policial se encontraba presente durante los hechos como integrante del grupo de los agresores, sin participar este en los hechos delictivos. Asimismo, los agentes proceden a sancionar su comportamiento de huida por desobediencia a la autoridad.

Un herido en una reyerta de madrugada en el Casco de Toledo - Foto: Yolanda Lancha

La víctima, de unos 57 años de edad, fue trasladado al Hospital Universitario de Toledo con varias contusiones en la cabeza como consecuencia de la agresión sufrida, que a su vez dejó un charco de sangre en el suelo delimitado dentro del perímetro de una terraza hostelera del entorno. El hombre está fuera de peligro y las heridas no presentan mayor gravedad.

Como elemento a destacar cabe reseñar que ya entradas altas horas de la mañana de este jueves el charco de sangre continuaba acumulando las miradas de los viandantes al no haberse recogido. Más reseñable aún si cabe es que a simple vista se apreciaba una única llave suelta en mitad del charco. No se ha determinado si tiene algo que ver en la agresión.

Tal es la incertidumbre hacia los hechos que incluso la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, que presentaba ante los medios de comunicación una detención de la Guardia Civil en la provincia, revelaba que la agresión de la plaza de la Magdalena se había producido con arma blanca. Unos hechos que desde Policía Nacional ni se confirman ni se desmienten para no desvelar más detalles sobre la investigación. 

Dudas que vuelven a dirigir al lector al inicio de todo, a aquellas dos llamadas a los servicios de emergencias que daban mensajes contradictorios sobre el uso de armas blancas en la agresión. Una sí y otra no. Ni confirman ni desmienten.