La Biblioteca Pública del Estado, calle San José de Calasanz número 14 de Albacete, acoge hoy, a las 19 horas, la presentación de la última obra de Adoración González Mateo, Aquellos tiempos, aquellas noticias. Albacete 1922-1932. La autora comentó a La Tribuna de Albacete las singularidades de esta obra.
¿Por qué esta obra?
Este libro es el tercero. El origen fue unos documentos que encontré de mi familia, de la Sombrerería Mateo de la calle Mayor, de mi tatarabuelo, donde ahora hay un solar. A partir de esos documentos comencé a investigar y publiqué Los que hicieron Albacete, empresarios, industriales y comerciantes. Como me sobró mucho material, el año pasado apareció Albacete en familias, con 25 familias. Justo un año después, como seguí investigando y tengo la suerte que está digitalizado todo en la Biblioteca del Instituto de Estudios Albacetenses, que ahora está en el Chalé Fontecha, me fijé en los dos periódicos más relevantes de la época, El Diario de Albacete y El Defensor de Albacete. A partir de ahí surgió.
¿Divide el libro en capítulos?
Así es, me salieron 15 capítulos de cosas muy variadas y es desde 1922 porque es el primer año que está digitalizado y como en 1931 comenzó la segunda república, un cambio muy grande, continúo hasta 1932, para ver ese cambio, aunque no me meto en política para nada. Cubro así 11 años.
¿Qué aspectos recoge?
Este libro cubre cómo era la agricultura, la alimentación, los alojamientos, la restauración, así como los espectáculos culturales, como teatro y cine, o los deportes, el fútbol. Se recuerdan aquellos nevazos típicos de Albacete, que sólo tenemos en el recuerdo y las personas ilustres que llegaron a nuestra ciudad, mujeres como Clara Campoamor, Victoria Kent, María de Maeztu. Parece que Albacete no tenía nada, pero estaba despegando y empezaba a florecer. Luego, uno de los más largos capítulos es el de la Feria, tan distinta a la de ahora, porque era un mercado ganadero, de los más importantes de España. Otro capítulo está dedicado a la medicina e higiene y cuáles eran las enfermedades frecuentes.
¿Cuáles eran?
La tuberculosis, desgraciadamente, fue un azote muy grande y, además, había una mortalidad infantil muy alta.
¿Cuáles eran los espectáculos más importantes?
Las mejores compañías de teatro venían a Albacete, la de María Guerrero, la de Margarita Sirgu, terminaban temporada en Madrid y pasaban por el Teatro Circo, el Cervantes, el Liceo, el Casino Artístico. Era un teatro muy variado y una oferta cultural muy grande, mucho más teatro que hay ahora mismo. Había cine mudo, con muchísimas proyecciones también y la primera película de cine sonoro fue en 1930, venía en el periódico del 11 de marzo. Se anunció como sensacional acontecimiento en el Teatro Cervantes, con un programa, entre otros, de la Revista de actualidades Movietone.
¿Qué acontecimiento marcó esos años?
Muchos, por ejemplo el Asilo de San Antón se inauguró en la eras de Santa Bárbara. La Fiesta del Árbol también surgió en esa época, como el edificio del Banco Central, donde está ahora el Santander. Era un edificio precioso, que se inauguró en 1929. En esa época se construyeron muchos palacetes, como el Chalé Fontecha. En los años 20 llegó mucho dinero, muchas empresas y la primera burguesía se construyó sus palacetes.
¿Cuál es el próximo proyecto literario?
Pues tengo un proyecto con el Colegio de Médicos, porque cumple este año el 130 aniversario. Se fundó en 1895, así que escribiré un libro con toda la historia del Colegio y un apéndice con 130 médicos, con pequeñas biografías.