Quirónsalud Albacete pone en funcionamiento en el centro Plaza Lodares la nueva Unidad de Estimulación Magnética Transcraneal perteneciente a la especialidad de Neurofisiología Clínica con el objetivo de ampliar la prestación de servicios del grupo sanitario relacionados con la salud neurológica y psiquiátrica en el ámbito ambulatorio en consultas externas, cubriendo el tratamiento de diversos trastornos neurológicos y psiquiátricos en adolescentes y adultos.
Esta nueva unidad estará dirigida por el doctor José Luis Guerrero Solano, especialista en Neurofisiología Clínica, que junto a un equipo de profesionales realizarán actividades de consulta de valoración y seguimiento orientadas a patologías derivadas de una serie de trastornos psiquiátricos y neurológicos, en concreto depresión, ansiedad, trastorno obsesivo compulsivo, tabaquismo y otras adicciones, esquizofrenia, dolor crónico, fibromialgia, enfermedad de Alzheimer, secuelas en pacientes con ictus, enfermedad de Parkinson, espasticidad en esclerosis múltiple, tinnitus (acúfenos) y epilepsia focal.
El doctor José Luis Guerrero indicó que la estimulación magnética transcraneal (TMS) fue introducida en 1985 como una herramienta diagnóstica, que, en las ultimas dos décadas ha demostrado su utilidad como un método terapéutico tanto en trastornos psiquiátricos como neurológicos, con la ventaja de ser una técnica no invasiva, ambulatoria, que no requiere de ningún tipo de preparación ni sedación, y muy segura. En la unidad se atenderán pacientes de ámbito privado exclusivamente.
La estimulación magnética transcraneal es un procedimiento que utiliza campos magnéticos de gran potencia y focalidad, para estimular grupos específicos de neuronas con el fin de inducir plasticidad cerebral que representa la facultad del cerebro para recuperarse y reestructurarse con el fin de mejorar los síntomas de diferentes patologías en las que se pueden identificar regiones específicas del cerebro que presentan una función inadecuada, como en los trastornos neurológicos y psiquiátricos antes mencionados.
Cabe destacar que esta herramienta es superior en seguridad, con muy escasos efectos colaterales, y en efectividad a los fármacos y terapia psicológica en las enfermedades psiquiátricas y neurológicas, y a la rehabilitación convencional en pacientes con secuelas de ictus, además de potenciar la efectividad de estas terapias cuando se usa en conjunto con ellas.