El Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Cuenca defenderá en el Pleno del próximo jueves una moción en la que se exige a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha la terminación de la Autovía del Júcar.

Según explicó la portavoz del PP  en la capital conquense, Beatriz Jiménez, la moción se presenta «a  tenor de la ridícula cantidad de 100.000 euros» consignada en el proyecto de presupuestos regionales para el próximo 2024.

Esta moción es la última 'novedad' de un proyecto que arrancó en 2004, cuando los gobiernos central y regional pactaron que el primero haría la Autovía de la Alcarria (Guadalajara-Tarancón) y el segundo la del Júcar (Cuenca-Albacete).

En 2005, se dio a conocer el trazado inicial de esta vía de 128 kilómetros de longitud que, en la provincia de Albacete, empezaría  en la capital provincial y seguiría por Tarazona de la Mancha, Madrigueras, Motilleja y Mahora.

Entre 2010 y 2011, se llegaron a licitar y contratar dos tramos. Entre ellos, el subtramo Albacete-Madrigueras, de 21,6 kilómetros de longitud  y cuyo trazado debía empezar en las inmediaciones del Polígono Industrial de Romica.

Este contaba con un presupuesto de 105,8 millones de euros y, de hecho, se llegó a firmar el contrato de ejecución de la obra. En 2011, con el PP al frente de la Junta, el tramo se sumó a la larga lista de obras   y proyectos cancelados por la Junta de Comunidades.

En 2016, ya con García-Page al frente de la Junta, se anunció la reactivación del proyecto pero con un cambio muy importante: en vez de tener un trazado propio, la autovía se haría 'duplicando' los carriles de la actual carretera autonómica CM-220 para reducir costes.

Pero este proyecto estaba ligado a otro, la autovía Guadalajara-Tarancón, que el Estado se comprometió a hacer en 2004 como parte de su acuerdo con el Ejecutivo autonómico. Y como este proyecto no avanzaba, tampoco lo hizo el otro.

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