El canon medioambiental del agua recientemente aprobado por el Gobierno de García-Page y las dos mociones presentadas por el Partido Popular y por Vox en pro de su supresión centró el Pleno que la Diputación celebró este jueves y en el que de nuevo, al igual que ha pasado en otras instituciones en los que también se han visto inciativas similares, el PSOE votó en contra y en consecuencia, dada su mayoría, fueron desestimadas.
El portavoz del Grupo Popular en la Diputación, Antonio Serrano, que fue el que defendió la moción del PP, no sólo lamentó que el Grupo Socialista de la institución a pesar, dijo, de sus repercusiones en el bolsillo de los vecinos o de que su carácter finalista no suponga una repercusión directa en la mejora de las infraestructuras hidráulicas de los municipios haya respaldado el que va a ser el cuarto gravamen relacionado con el consumo del agua, sino que también aseguró que son varios los alcaldes del PSOE que están preocupados por un canon que, explicó, llegará en el 2025 a pesar de no ser obligatorio.
En la misma línea se mostró, por su parte, la diputada de Vox, Lorena González, la cual, además de compartir los argumentos que previamente había expuesto el PP en pro de la supresión de este impuesto, tuvo palabras tanto para con el nefasto momento que, en su opinión, llega en términos económicos, como con el hecho de que estamos hablando de una decisión que se apoya en una directriz europea de hace 20 años «cuando, además, añadió, la solución no es subir impuestos sino arreglar».
En el lado contrario se sitúo el socialista, Miguel Zamora, a cuyo entender los 'populares' «llevan equivocándose desde hace tiempo en relación con el debate del agua», a la que vez que lamentó que fuesen no una sino dos las mociones presentadas y «con los mismos argumentos», puntualizó.
«Comparto lo de la preocupación pero lo que ustedes olvidan es que nos lo están exigiendo desde Europa si queremos que nos lleguen otros fondos o que en el caso concreto de Castilla-La Mancha entre un 70 y un 80 por ciento de sus vecinos van a estar precisamente exentos de pagar este canon medioambiental porque su consumo va a estar por debajo a partir del cual se agrava, lo mismo que no se va a pagar por las piscinas municipales», concluyó Zamora.