Teresa Hermida Correa es la vicepresidenta del Consejo de la Abogacía de Castilla-La Mancha, pero saltó a la fama nacional en 2016 por el juicio a la conocida como La Manada de los Sanfermines, donde representó a la víctima de la agresión sexual, un caso del que aún quedan flecos por resolver y del que habló ayer a los letrados de Albacete, en una Jornada Formativa de Violencia de Género, que se realizó en la sede del Colegio de la Abogacía.
El caso de la manada marcó un antes y un después en el tema de las agresiones sexuales a nivel judicial.
Efectivamente, el caso de La Manada marcó un antes y un después en todos los procesos en los que se trataban los temas de agresiones sexuales y para todas las víctimas supuso un punto de partida y un punto de inflexión, porque a raíz del caso de La Manada de Pamplona, lo que se hizo ya es modificar el Código Penal para modificar la Ley aplicable a todos estos supuestos, que tuvo su culmen con la denominada Ley del sí es sí.
Entiendo que para su cliente la primera sentencia fue un jarro de agua fría.
Ha habido tres sentencias, la inicial de la Audiencia Provincial de Navarra consideró los hechos como abuso y no como agresión. La segunda del Tribunal Superior de Justicia de Navarra lo que hizo fue ratificar la primera y ya en 2019 fue el Tribunal Supremo el que, efectivamente, consideró que los hechos podían considerarse como agresión sexual y no como abuso. La primera sentencia fue un jarro de agua fría que incluso la víctima se pensó en si seguir adelante porque estaba fatal. Después ya recurrimos y el TSJ fue otro jarro de agua fría y por fin vino la compensación en el Supremo, cuando ya nos dio la razón.
Supongo que en este período, entre la primera y la última sentencia, la opinión pública fue un apoyo.
La opinión pública fue determinante, porque en el primer momento en el que sale la sentencia de la Audiencia Provincial, ya hay un grupo de chicas muy jóvenes que deciden que eso no puede ser así y empiezan a través de redes a hacer concentraciones en favor de todas las mujeres, niños o personas en general que pudieran estar en una situación parecida a la de la víctima. Ahí dicen el 'hermana yo si te creo' y piden que el caso se considere violación y no abuso. Empiezan a salir a la calle y empieza un movimiento social a nivel, no sólo nacional, sino internacional.
Este caso trajo la denominada Ley del sí es sí, que ha sido una de las más polémicas de los últimos años. Supongo que no esperaban que, en muchos casos, fuera a terminar en reducciones de pena de delincuentes sexuales.
Efectivamente. Yo como ciudadana, ni la víctima, hemos cuestionado el espíritu de la Ley, siempre hemos pensado que el espíritu de la Ley del sí es sí era el de proteger a la víctima. Como mimbres y como cimientos partió bien, pero la ejecución fue fatal, no pudo ser peor, incurriendo en graves irregularidades, después modificándose tarde, después dejando vías de escape, fue un verdadero desastre, incluso para mi víctima el problema se plantea ahora con la reducción que se pretende de la pena de uno de ellos. En principio uno de los condenados por el caso de La Manada ha recurrido, la Audiencia Provincial de Navarra le desestimó la rebaja de la condena y el TSJ dijo que sí y ahora estamos en el Supremo.
En cualquier caso, cree que el espíritu de la Ley es positivo.
El espíritu de la Ley del sí es sí es positivo, porque intenta proteger a la víctima, garantizar sus derechos, implementar los mismos y tipificar cualquier acto sexual violento cometido contra una mujer como agresión sexual, sin tener que entrar a valorar si nos encontramos ante un abuso, con eso ya me parece que la Ley está bien. El problema está en las irregularidades al no contemplarse los límites o consecuencias de la retroactividad y el tema de las horquillas entre penas máximas y mínimas, todo eso sirvió para que hubiese un revuelo y se indicase que los culpables de todo eran los jueces.
¿Cómo se encuentra su cliente?, ¿cómo ha vivido todo este proceso?
El proceso lo ha vivido mal, bastante mal, por ejemplo ya no ve televisión e intenta no escuchar nada, porque en cualquier noticia con referencia a agresiones, como últimamente el caso de Dani Alves, sacan las fotografías de los agresores de La Manada de Pamplona, que es algo que no entiendo. Ella está viendo las noticias y le salen sus agresores, lógicamente eso es una revictimización para ella, porque ya no es sólo que pasara por un proceso, es que esto pasó en 2016 y estamos en 2024.
Una revictimización porque cada vez hay más 'manadas' y siempre se recuerda a la original.
Se recuerda ese que fue el primero.
¿A qué cree que se debe el aumento de casos de estas características?, ¿hay más denuncias o más agresiones sexuales?
Es muy difícil denunciar, porque una chica que sufre una agresión sexual de este tipo, lo primero que piensa es qué van a decir de mí, me van a señalar, van a saber quién soy y hay muchas chicas y chicos que no denuncian, pero si no denuncian las cosas no cambian. En cualquier caso, las cosas están cambiando, pero creo que hay más casos de agresión sexual por la falta de educación, que es primordial, por el acceso a la pornografía en las redes a edades cada vez más tempranas sin ningún tipo de control, no sólo de los padres, sino también de la gente que está a su alrededor, porque todos hacen lo mismo y esto se nos está escapando de las manos. En cualquier caso, lo más importante es la educación en los colegios, en las casas, en los institutos y la Ley del sí es sí prevé esa educación.
¿Ve positivo que se regule el acceso a la pornografía y que haya mayor regulación?
El acceso a la pornografía tiene que estar regulado, yo eso lo he vivido y padecido, porque soy profesora y veo como los jóvenes pueden acceder sin ninguna cortapisa a una página pornográfica, en la cual hay contenidos denigrantes para la mujer y violentos y los jóvenes lo ven, lo miran, se enganchan y normalizan la situación.
¿Qué temas ha tratado en su ponencia con los letrados albacetenses?
La ponencia ha sido un poco más subjetiva que técnica y he contado también el testimonio de la chica, por qué no la creen, cómo hay que considerar los testimonios de las víctimas, cómo hay que tratar a una víctima y he tratado la revictimización de las víctimas por todos, por los abogados, el juez del voto particular y también he hablado de La Manada virtual de cuando se filtraron los datos de la víctima y la gente los público en redes y en medios de comunicación, eso está denunciado y hay varios procesos abiertos y cerrados, con sentencias pioneras, como por ejemplo, la condena de un foro de Internet, como responsable civil subsidiario por unas publicaciones.