El Ayuntamiento de Almansa acaba de adjudicar a la empresa Intagua Obras Públicas SL el contrato para transformar la Casa del Llavero, que forma parte de las infraestructuras y dotaciones del pantano, en un moderno albergue con capacidad para de 25 plazas.

De acuerdo a los términos de la adjudicación, dicha firma dispone de siete meses y algo más de 471.000 euros para modernizar y adaptar a un nuevo uso la que fue la residencia del guarda del Pantano desde 1930, cuando la levantó la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Desde que la gestión del Pantano pasó al Ayuntamiento almanseño, se planteó qué hacer con el edificio, que se hallaba en un estado de conservación bastante precario. Se llegó a hablar de la posibilidad de convertirlo en un Museo del Agua, pero la idea no terminó de cuajar.

El proyecto de rehabilitación, obra del arquitecto Ángel Fito, se dio a conocer a finales del pasado mes de febrero, con una exposición en la Casa Festera que inauguró la propia alcaldesa, Pilar Callado, para dar a conocer en detalle la propuesta de transformación.

La obra recién adjudicada respetará los elementos básicos del inmueble, como son la fachada, el forjado intermedio y la cubierta, en los que sólo se llevarán a cabo tareas de mantenimiento y de conservación. Habrá tres accesos, de los que el principal y accesible será el situado en la zona sur.

Los trabajos de mayor entidad se centrarán en la distribución y equipamiento de los espacios. Habrá dos plantas, baja y primera. En la planta baja, de 189 metros cuadrados, habrá un cuarto de equipos, un aseo, un baño accesible, una habitación accesible, salón multiusos y comedor.

En la primera planta, que tendrá casi 177 metros cuadrados construidos, estará la de sala limpieza, el baño para mujeres, el de hombres y tres habitaciones. La rehabilitación del edificio también busca integrarlo con su entorno y lograr la máxima conexión posible con el exterior.