«Me ilusiona mucho debutar en una tierra tan taurina»

Pedro Belmonte
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El novillero salmantino Marco Pérez, niño prodigio del toreo, hará su presentación en la que se ha considerado «novillada del siglo», en la plaza de Casas Ibáñez, junto a los triunfadores de la temporada, 'Jarocho' y Samuel Navalón

Marco Pérez. - Foto: Gregory Boyer

El próximo sábado, 24 de agosto, el novillero salmantino Marco Pérez, hará el paseíllo en la plaza de toros de Casas Ibáñez, donde campartirá cartel con Jarocho y Samuel Navalón para medirse                  a astados de Murube y Carlos  Núñez. 

Es la primera temporada vestido de luces y con picadores en España. ¿Esa facilidad en la cara del utrero es natural?

Supongo que sí. No me he parado a pensarlo nunca, torear es algo que llevo dentro de mi desde que era un niño y que me sale del corazón. Es mi manera de expresarme. 

Hemos visto desde hace unos años muchos vídeos en el campo siendo muy pequeño. ¿La expectación que creó la mantiene ahora en la plaza con el utrero y compitiendo con otros novilleros con mayor edad?

La expectación que puede haber entorno a mí, creo que no soy el más indicado para hablar de ella. Yo me dedico a torear y tratar de hacerlo lo mejor posible con todos los defectos y virtudes que podemos tener los novilleros. Aquello de los vídeos fue una etapa pasada ahora mi carrera es la de torear, como estoy haciendo, con otros compañeros de mi generación y en aquellos carteles donde los empresarios quieran contar conmigo.

Se presenta en la provincia de Albacete en una novillada bautizada como la «novillada del siglo», con dos compañeros que aprietan. ¿Qué espera de la plaza y la afición de Casas Ibáñez?

Me ilusiona mucho debutar en una tierra tan taurina como Albacete, cuna de muchos matadores de toros a los que admiro. Es una novillada muy interesante para los aficionados, somos tres novilleros que queremos triunfar y estoy seguro que vamos a ofrecer una buena tarde. 

¿Por qué no va a la Feria de Albacete y está en otros ciclos taurinos importantes?

En esas cosas no entro, las contrataciones las lleva mi apoderado. La gestión de mi carrera está en sus manos y goza de toda mi confianza. En cualquier caso, si Dios quiere, espero torear muchas tardes en Albacete en un futuro. 

El toreo marcha muy deprisa y no se les aguantan más de dos temporadas a los novilleros. ¿Se plantean una alternativa en poco espacio de tiempo?

No tenemos planteado nada de alternativa, es muy pronto. Esta es mi primera temporada como novillero con caballos. 

Muchos toreros precoces pierden la frescura y gracia cuando crecen. ¿Qué hay que hacer para que no ocurra, como no la perdió El Juli?

No me planteado esas cosas, la verdad. Mi obsesión es torear, es aprender, es corregir errores y potenciar virtudes. Lo que quiero es ser cada vez mejor torero y dar pasos en mi profesión. 

¿Qué le llevó a un niño de apenas ocho años a querer ser torero, conociendo por la familia la dureza de este aprendizaje, habiendo en esta época tantas posibilidades en otras actividades?

Nada concreto, para mí el toreo es algo que he vivido desde muy niño y nunca me he planteado otra cosa porque es lo que siento. Conozco las dificultades de esta profesión como imagino habrá otras diferentes en otras disciplinas artísticas. Para mí, el toreo es mi manera de expresar sentimientos. Con eso me quedo.