El portero internacional checo Tomas Vaclik ha afirmado ayer haberse sentido «muy bien» en su debut en la Segunda División española con el Albacete, en el partido que le enfrentó al Sporting de Gijón en el estadio El Molinón.

Vaclik, que ya había competido en la máxima categoría del fútbol nacional en su etapa con el Sevilla, declaró estar contento por volver a jugar «tras estar mucho tiempo sin disputar un partido oficial. Todavía tengo mucho trabajo por delante pero creo que es un buen comienzo personalmente», aunque lamentó «no haber podido sacar puntos, a pesar de que el equipo hizo un buen partido».

Tras casi un mes en la ciudad, el cancerbero checo cree que «físicamente estoy bien. No sentí nada durante el partido, ni después. Me sentí muy bien. Creo que el trabajo que he hecho durante la pretemporada y el tiempo que estuve sin equipo está muy bien y ojalá dé sus frutos».

El Albacete cayó 2-1 en tierras asturianas y jugó más de 50 minutos con un futbolista menos por la expulsión de Agus Medina en el minuto 41.

Por ello, el veterano futbolista valoró que «a pesar de estar tanto tiempo con un jugador menos, el equipo estuvo cerca de puntuar ante un gran rival».

El guardameta, de 34 años y ganador de la Europa League con el Sevilla en la temporada 2019-20, añadió que espera «con ganas» debutar este fin de semana en el Carlos Belmonte, aunque todo dependerá de si el entrenador le elige para defender la portería, «Yo trabajaré para que me elija, claro», aseguró  Vaclik, que aseveró que el conjunto albaceteño tiene claro su objetivo y envió un mensaje optimista a la afición, a la que ha dicho que «tenemos que estar juntos, porque veo al equipo muy vivo y cada jugador está dando su cien por cien».

Por último, alertó de la necesidad de que el bloque blanco comience a puntuar como visitante. «La clave es ganar los partidos de casa pero también es importante hacerlo fuera».