El delegado de la Junta en Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos, ha recibido, este lunes, en la Casa Perona de Albacete, al alcalde de Hoya Gonzalo, Eliseo Fernández, y al concejal del municipio, Rubén Ruiz.
El encuentro viene motivado por el compromiso del Gobierno regional de abrir las puertas de sus delegaciones para tender la mano a los municipios y sus demandas, con el fin de mejorar la vida de todos los castellanomanchegos y castellanomanchegas.
En esta línea, el delegado de la Junta ha atendido las peticiones que el alcalde de Hoya Gonzalo le ha dado a conocer y que se han centrado, principalmente, en los proyectos de un Centro de Mayores y una ludoteca, para cuya construcción y puesta en marcha ha solicitado la ayuda del Gobierno de Emiliano García-Page. En el caso de la ludoteca, Eliseo Fernández ha aclarado que se trata de un espacio necesario, ya que, actualmente, los niños y niñas del municipio no cuentan con un espacio propio para el desarrollo de sus actividades, y comparten espacio con la biblioteca.
Por su parte, y a este respecto, Ruiz Santos, ha confirmado que la Junta de Comunidades estará al lado de Hoya Gonzalo para el desarrollo de estos proyectos y, también en otros. Pues ha apuntado que la localidad albaceteña va a participar de la próxima convocatoria del Plan de Empleo, para lo que recibirá 26.700 euros de parte del Ejecutivo autonómico, y contará también con un Recual de zonas verdes, por el que recibirá una subvención de 106.800 euros, que permitirá la formación de ocho vecinos y vecinas de la localidad.
Para finalizar, el delegado de la Junta ha recordado que el Gobierno regional también financió parte de las obras que han permitido la instalación de una planta de osmosis inversa que ya trabaja en la reducción del alto índice de nitratos en la localidad, y por ende, en la mejora de la calidad del agua para el abastecimiento. De esta manera, se ha puesto fin a un problema provocado, principalmente, en época de lluvias, cuando las aguas arrastraban los nitratos de la zona de cultivo hasta el depósito municipal, hasta el punto que el agua de abastecimiento llegó a superar el nivel de nitratos que marca la normativa sanitaria.