Hace pocos días, se dio a conocer la aparición de un togatus, una antigua escultura de la época romana, en las excavaciones que se desarrollan en el yacimiento de Los Cucos, en Bogarra. Pero en el mundo de la arqueología, el contexto lo es todo. Cuando se descubre una pieza de épocas pasadas, es tan importante la pieza misma como todo lo que la rodea, en el tiempo y el espacio.
El arqueólogo Arturo García López, de la Universidad de Granada, es codirector de esta excavación y, en esta entrevista, explica los 'qué', los 'quiénes', los 'cuándo', los 'cómo', los 'dónde' y los 'porqués' que rodean esta enigmática pieza de un torso humano que viste la toga, la vestimenta de las grandes ocasiones entre los ciudadanos romanos.
¿Cuándo se comenzó a trabajar en la zona de Los Cucos?
Empezamos a trabajar en el yacimiento de Los Cucos en 2021. Hicimos una primera campaña y luego lo dejamos un poco en el dique seco para centrarnos más en la Torre de Haches, que estaba aquejada de graves problemas estructurales.
Al empezar, ¿intuían que iban a encontrar el 'togatus'?
No íbamos a ciegas del todo. En el año 2021, ya hicimos una prospección y recopilamos todos los datos que conseguimos con un GPS y sabíamos que la zona era prometedora. Eso no quita que descubrir el 'togatus' fuese una grata sorpresa, porque apareció como una pieza reciclada, aprovechada como parte de una estructura más moderna.
¿La Torre de Haches y Los Cucos son yacimientos distintos o forman parte de un conjunto?
Son yacimientos relacionados, aunque sus secuencias son no son iguales. Los Cucos es una zona ocupada por el hombre desde el siglo VI Antes de Cristo, en los albores de la cultura ibérica, que se desarrolla sin interrupción hasta el período romano. Luego hay un hiato, una época en blanco, y después se vuelve a ocupar durante el período islámico.
¿Qué relación tiene con la Torre?
Digamos que coinciden, sobre todo en la época almohade, cuando la Torre de Haches es una fortificación que vigila el valle del río Bogarra y los Cucos es una zona habitada, ocupada en las inmediaciones de la Torre, lo cual es una pauta muy habitual en las fortalezas de la época.
Antes de que llegasen ustedes, ¿hubo alguna cata o excavación?
Claro que sí. En esta misma zona apareció en el año 1947 la Esfinge de Haches, una conocida escultura ibérica que ahora mismo se encuentra en el Museo de Albacete y que formaba parte de lo que creemos era un monumento funerario, a su vez integrado en una necrópolis.
¿Ese monumento se parecería al de Pozo Moro, que ahora está en el Museo Arqueológico Nacional?
Creemos que sí. Es una hipótesis, pero con los elementos que tenemos creemos que se trata de un monumento funerario en forma de torre, con esculturas semiexentas en las esquinas, que es el mismo modelo de Pozo Moro y el de otros monumentos funerarios similares que hay en Alicante, en Andalucía e incluso en el norte de África.
¿Pero cómo se puede deducir que hay todo un monumento a partir de una escultura aislada?
Porque no aparece de forma aislada. Para empezar, la Esfinge de Haches no se una escultura exenta, se nota que es esculpió para formar parte de algo mucho mayor. Junto a la esfinge, aparecieron restos de una figura similar, como una garra que nos indica que había más esculturas similares, y por su forma, sus características y por otros restos se puede deduce que iban en las esquinas de una estructura.
¿Este monumento, como el de Pozo Moro en Chinchilla, sería parte de una necrópolis?
Si, había una necrópolis, pero lo intrigante es que, si hay una ciudad de los muertos, una necrópolis, es lógico pensar que también tiene que haber cerca una ciudad de los vivos, pero por el momento no la hemos encontrado.
Entonces, ahí tienen ustedes todo un misterio a resolver.
Bueno, no tanto. El trabajo arqueológico no es ponerse a excavar a lo grande directamente, hay que hacer prospecciones, catas, que son pequeños sondeos que haces para ver qué hay debajo. Como cualquier ensayo, a veces da resultado y a veces no, así que tenemos motivos fundados para pensar que en época ibérica había algún asentamiento humano, aunque no haya aparecido aún.
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