Una semana después de ser censurado por el Senado, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha sido reprobado este jueves por el pleno del Congreso, que ha pedido que sea destituido por su gestión y por la muerte de dos guardias civiles en Barbate (Cádiz) arrollados por una narcolancha el pasado día 9.
La moción, impulsada por el PP, ha sido aprobada gracias a los votos a favor de los diputados populares, de Vox y UPN y la abstención de Podemos, Junts y Coalición Canaria.
Hace un año Marlaska ya fue reprobado por el Congreso por su gestión de la tragedia de la valla de Melilla, donde murieron al menos 23 inmigrantes al intentar entrar en España.