El camino que lleva a Belén pasa siempre por Castilla-La Mancha. Sus majestades los Reyes Magos han cumplido hace unos días con la tradición, dejando regalos a todos los niños; y los que ya no lo son tanto. Pero esto no siempre ha sido así. Aunque las cabalgatas navideñas llevan más de un siglo celebrándose en España (Alcoy fue la primera localidad en hacerlo en 1866), no siempre han tenido ese formato.
Las adoraciones de los Reyes Magos han estado presentes desde tiempos medievales, haciéndose belenes vivientes en la región incluso mucho antes de 1866, pero el protocolo con el que hoy identificamos toda cabalgata no se instauró completamente en Castilla-La Mancha hasta los primeros años del siglo XX. Posteriormente, la Guerra Civil congelaría estas celebraciones, para recuperarse de nuevo entre los años 40 y 60.
Para datar la primera cabalgata de Reyes en la región hay que acudir a los registros periodísticos, encontrándose la primera referencia a una de ellas en la revista ilustrada Vida Manchega, publicada en Ciudad Real entre 1912 y 1920. En su número del 15 de enero de 1914 se hace referencia a dos industriales de Toledo, un peluquero y un encuadernador (Valentín Fernández Moraleda y Santiago Torres), que «iniciaron hace dos años (1912) celebrar la víspera de los Reyes con el recorrido de los Reyes Magos por las principales calles de la ciudad, y así lo hicieron».
Reparto de juguetes entre los niños más necesitados en la Navidad de 1920 en Ciudad RealLos reyes iban montados en «vistosas cabalgaduras» y los juguetes se portaban en una «carroza artística» para que «los criados de los fastuosos monarcas orientales, subidos en escaleras, depositasen los regalos en los balcones».
El Ayuntamiento de la ciudad se sumó a la iniciativa de estos dos comerciantes en 1913, así como otro periódico de la ciudad, El Noticiero, que celebró un año después una entrega de juguetes para los niños más necesitados.
La hemeroteca muestra los primeros registros de cabalgatas de Reyes de Castilla-La Mancha en Toledo, aunque bien es cierto que la tradición se celebraba entregando juguetes en todos los municipios de la región.
Imagen tomada en Toledo en 1914 (publicada en Vida Manchega del 15 de enero de ese año) de la entrega de juguetes a niños pobres en la sede del periódico El Noticiero.La segunda ciudad en contar con este tipo de espectáculos navideños fue Guadalajara. Así se registra en los periódicos El Liberal Arriacense del 18 de diciembre de 1915, como en La Palanca del 21 de diciembre de ese mismo año. Ambos diarios señalan cómo en el Casino Nueva Peña organizó una cabalgata para celebrar su cuarto aniversario «con los Reyes Magos con su corte, jinetes, carrozas y acompañamiento».
Cuenca capital fue la tercera en sumarse, en 1918, tal y como se cuenta en el Eco de Cuenca. El entonces recién creado Ateneo Conquese organizó la primera cabalgata de Reyes en la ciudad, recogiendo «690 juguetes» para repartirlos entre los niños de la Casa de la beneficencia, del Hospital de Santiago y del Colegio de las Josefinas.
Con todo, el privilegio de tener la foto más antigua de una cabalgata de Reyes en la región lo tiene Ciudad Real, que en enero de 1920 publicó la instantánea de sus majestades de Oriente subidos a caballo en la revista ilustrada Vida Manchega.
La cabalgata contaba con «una carroza del árbol de Noel y la estrella que guiará a los Reyes Magos». Se lanzaron cohetes y bengalas, y se vendieron 23 muñecas hechas por alumnas y profesoras para recaudar fondos benéficos.
Por último, las referencias a cabalgatas en Albacete no aparecen en la hemeroteca hasta 1924, pero eso no quiere decir que hubiera ese tipo de festejos mucho antes. La proximidad con la zona de Alicante, precursores de las cabalgatas de Reyes, hace pensar que se daban desde hace tiempo, pero la primera noticia al respecto en la ciudad aparece en El Diario de Albacete del 5 de diciembre de 1924, cuando se comenta que «el Círculo de Bellas Artes organizará la sensacional cabalgata». Un siglo de genial tradición.