Silvia, Vanesa, Patricia y María José son las protagonistas del cortometraje documental que la Federación Down Castilla-La Mancha ha realizado con la colaboración del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha y del Ayuntamiento de Talavera. Ellas, mujeres por encima de todo, ayudan a romper prejuicios en torno a su discapacidad, síndrome de Down, y demuestran que esto no las condiciona para desarrollar su vida personal, familiar, laboral y de ocio, como el resto de personas.
Bajo el título 'Eliminando prejuicios desde la igualdad', de la directora talaverana María Mun, se ha presentado en el centro cultural Rafael Morales de Talavera este trabajo que busca normalizar y conceder un carácter de igualdad a personas que, con capacidades diferentes, se enfrentan a la vida como todos.
Así, junto a dos de las protagonistas del corto, Silvia Lara Perea, de Cuenca, y Vanesa Blanco Otero, de Toledo, y su directora, asistieron al estreno José Julián García, presidente de la Federación Down Castilla-La Mancha y Lourdes Luna, directora del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha.
Precisamente Luna puso en valor que este tipo de trabajos muestran que las personas con síndrome de Down «pueden tener y de hecho tienen vidas tan normales como podemos tener personas que no tengamos esta condición», por lo que destacó la importancia no solo de «visibilizarlo sino de apoyarlos desde las administraciones, apoyarlos económicamente como venimos haciendo desde hace años» recordando que en la última década se ha destinado más de 1,1 millones de euros a combatir esta realidad desde distintas líneas de ayuda de la Consejería de Igualdad».
La directora del Instituto de la Mujer en la región subrayó las dificultades a las que se enfrentan estas mujeres que, a esta condición, suman otras apoyadas en su discapacidad que les puedan llevar a sufrir una «discriminación múltiple», que las impiden desarrollarse laboral o socialmente.
Por su parte, el presidente de la Federación Down Castilla-La Mancha, José Julián García, que agradeció la acogida de la ciudad y de Down Talavera, destacó la «doble lucha» por ser mujeres y discapacidad y mostró su empeño porque todos «vivamos en una sociedad inclusiva, más equitativa y mejor para todos». En la misma línea, el alcalde José Julián Gregorio ha insistido en que las personas «con capacidades diferentes» deben de «estar integradas en una sociedad igualitaria e inclusiva» y animó a trabajar de la mano «para conseguir eliminar esas barreras injustas alimentadas por ciertos prejuicios».
La grabación del cortometraje-documental se ha llevado a cabo en la ciudad de Talavera, y además de la directora María Mun, de aquí son también todas las personas adultas, sin discapacidad, que participan en él, como Aránzazu Gutiérrez, Prado Bonilla, Ruth Jiménez, César Pacheco, Melania Deocal, Prado Garvín, Manuel Carrasco y Gonzalo Arderius.
El cortometraje versa sobre cuatro mujeres con Síndrome de Down de distintos puntos de Castilla-La Mancha, donde muestran su cotidianeidad, su trabajo, su vida personal y familiar cada día. Al otro lado de la pantalla se encuentran personas adultas, de distintos sectores de la población sin vínculos con el Síndrome de Down, produciéndose así un diálogo y una puesta en valor de las mujeres con Síndrome de Down, rompiendo estereotipos establecidos en cuanto a su condición de mujeres con Down.
Un cortometraje-documental que en 25 minutos, ayuda a desmontar prejuicios y ver la vida con otros ojos.