En el año 2024 se conmemora el V Centenario del inicio de las obras de construcción de la iglesia parroquial de Lezuza. Una inscripción en uno de los arcos góticos del interior del templo nos lo recuerda: «A XXIIII de junio de MDXXIIII años se empeço a haser esta Yglesia seyendo visitador y vicario el magnífico y reverendo siñor el Licenciado A. Romero de Ferrera». Las obras demoraron 260 años y se concluyeron a finales del siglo XVIII.
500 años de historia de este templo merecen ser celebrados con unos apuntes históricos y artísticos que nos hagan conocerlo mejor. La iglesia fue declarada Monumento Nacional en 1982, hoy tiene la catalogación de Bien de Interés Cultural (BIC). Según los estudios y trabajos de José Ángel Munera Martínez, podemos destacar las siguientes características:
La iglesia de Santa María de la Asunción es una edificación donde se mezclan los estilos gótico, renacentista, barroco y neoclásico. La iglesia es de nave única, de planta rectangular. Está dividida en cinco tramos más la cabecera. Las bóvedas son góticas, de crucería, nervadas, con diseños estrellados de gran variedad y riqueza.
El templo tiene dos portadas. La del norte, de características góticas, es una portada abocinada ojival con arquivoltas protegida con alfiz. El tímpano alberga una pequeña hornacina avenerada renacentista con una escultura de la Piedad. La portada está resguardada por un pórtico, portal o atrio que ha sufrido varias remodelaciones, la última del siglo XVIII. Los arcos del pórtico apoyan sobre pilares formados por cuatro medias columnas adosadas entre sí. Los capiteles son de orden toscano. Encima del arco central encontramos el escudo pontificio de San Pedro.
La portada del poniente, la que abre la iglesia a la plaza, es de estilo neoclásico. El vano está formado por un arco adintelado. Sobre las dovelas aparece una doble cornisa. A ambos lados de la puerta hallamos dos medias columnas adosadas con capitel toscano que nos recuerdan a las columnas de Hércules.
Entre los contrafuertes se abren capillas-hornacina con escasa profundidad, cerradas en altura con bóvedas de cañón. Posteriormente dos de estas capillas se ampliaron dando lugar a las actuales capillas del Bautismo y de la Dolorosa.
En su origen, la iglesia contaba con un claustro gótico situado al sur. Este se eliminó a mediados del siglo XVIII y se construyó la actual capilla de la Virgen de la Cruz, de estilo barroco. Tiene planta de cruz latina, con ábside frontal y cúpula sobre pechinas en el crucero. Las pechinas están decoradas con figuras que representan a los evangelistas.
Más información en la edición impresa y en la APP de La Tribuna de Albacete (https://latribunadealbacete.promecal.es)