El sector agrario de Albacete está doblemente agitado. El pasado jueves, la patronal Asaja anunció movilizaciones contra el Gobierno, y esta mañana el sindicato CCOO hizo un anuncio similar, pero contra Asaja.
Según los dirigentes sindicales, mientras Asaja pide y obtiene ayudas, compensaciones, bonificaciones y flexibilidad de la PAC, sus miembros se niegan a mejorar las condiciones de los trabajadores agrarios de la provincia.
"Las negociaciones del convenio provincial del sector están totalmente paralizadas", ha dicho Itsaso Cortés, secretaria de Industria de CCOO-Albacete, "y Asaja se niega a descolgar el teléfono para reactivarlas; es el único convenio congelado en la provincia".
En la provincia hay 10.000 trabajadores pertenecientes al sector. Tras la reciente subida del salario mínimo, todas las categorías incluidas en su convenio, menos una, necesitan actualizarse. Pero Asaja-Albacete no está dispuesta a hacerlo.
"Es una situación sin precedentes que exige medidas sin precedentes", explica la secretaria general de CCOO-Albacete, Carmen Juste, "porque en 2022 se acordó mejorar el convenio, que aún estaba bajo el Estatuto de los Trabajadores".
Para reactivar las negociaciones, el sindicato acaba de recurrir a una medida inédita en la provincia: el arbitraje, un procedimiento extraordinario previsto por la ley pero nunca utilizado en toda la historia de la negociación colectiva en Albacete.
"El viernes por la mañana habrá un primer intento de mediación", y si el intento no prospera, "daremos el siguiente paso, el arbitraje por un mediador independiente y un laudo arbitral que será vinculante para todas las partes implicadas".
Si la iniciativa no prospera, el sindicato anuncia que habrá movilizaciones "porque no sería de recibo que un sector que recibe millones de euros en ayudas públicas sea, al mismo tiempo, un sector que tiene a la mayoría de sus empleados fuera de la legalidad".