La psoriasis es una enfermedad sistémica inflamatoria de la piel, común y no contagiosa, que afecta al 2,3% de la población, es decir, a más de un millón de personas en España, y de ellas, unas 44.000 en Castilla-La Mancha y 8.500 en la provincia de Albacete. Ayer precisamente se celebró el Día Mundial de esta patología, para cuyo abordaje, sobre todo, en los casos de psoriasis severa o grave, el Hospital General cuenta desde hace varios años con una consulta de apoyo y seguimiento de Enfermería.

El jefe del Servicio de Dermatología de la Gerencia de Atención Integrada de Albacete, el doctor Eduardo Escario, detalló que a través de esta consulta se ofrece como uno de los tratamientos disponibles para los casos de psoriasis moderada fototerapia, tratamiento que inicialmente sólo se administraba en horario de mañana dos días a la semana y que ahora también desde hace tres años se ofrece en horario de tarde, para dar servicio a los pacientes que trabajan o estudian y que en horario de mañana no pueden acudir a recibir esta terapia, «al ser el Hospital el único centro tanto público como privado que a día de hoy ofrece fototerapia con rayos ultravioleta UVA y UVB de banda estrecha».

No obstante, el responsable del Servicio de Dermatología precisó que la mayor parte de los psoriásicos, entre un 70 y un 80% de los casos, son controlados con cremas de uso tópico y medidas higiénicas adecuadas, y sólo un 10% de los casos son severos y otro 10% presenta síntomas moderados.

Entre 150 y 200 son los pacientes de la GAIde Albacete con psoriasis más grave que se benefician en la actualidad de fármacos biológicos, que según el doctor Escario han supuesto una auténtica revolución para la mejoría de estos casos, ya que controlan la inflamación que provoca esta patología. «Estos medicamentos han mejorado tanto en los últimos años, que en algunos casos con tres inyecciones subcutáneas al año los pacientes psoriásicos quedan limpios de enfermedad». No obstante, el jefe de Dermatología precisó que también hay que tener en cuenta los efectos secundarios de estos tratamientos, que requieren de un seguimiento. «Son fármacos financiados pero muy costosos de ahí que son sólo un grupo de pacientes seleccionados los que se benefician de los mismos», agregó.

Además, en los casos de artritis psoriásica, el doctor Escario puntualizó que los afectados son tratados en consultas simultáneas de Dermatología y Reumatología. «Hasta un 40% de los pacientes con psoriasis tienen artrosis psoriásica, dolencia que requiere de un control precoz porque deja secuelas importantes, en concreto causa deformidades», apuntó.