El Teatro Regio de Almansa acogió ayer la entrega de los Premios Gran Selección Campo y Alma 2024, con una gran gala a la que asistieron más de 500 personas llegadas de toda Castilla-La Mancha y que presidió el máximo responsable del Gobierno autonómico, Emiliano García-Page.
Estos galardones se entregan desde 1990 y son los más antiguos en su género de Castilla-La Mancha. Este año, presentan dos novedades con relación directa con la provincia de Albacete: dos menciones para las dos figuras de calidad, la Denominación de Origen Protegida (DOP) Nueces de Nerpio y la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Cebolla de La Mancha.
La alcaldesa de Almansa, Pilar Callado, intervino en calidad de anfitriona y agradeció la elección de la ciudad como sede de los premios «porque nuestra ciudad no sólo es conocida por la industria del calzado, también por los vinos de la Dominación de Origen y por la gran calidad de su gastronomía».
En este sentido, recordó que los vinos de la DOP Almansa son parte imprescindible de las cartas de los casi 30 restaurantes activos en la ciudad, de los que destacó tres para dar un ejemplo de la variedad de la restauración local, como son Maralba, Pincelín y La Ramona.
Por su parte, el presidente de la Diputación Provincial de Albacete, Santiago Cabañero, señaló que en total «en esta provincia, tenemos 12 de denominaciones de calidad y con todas colaboramos, por la importancia que tiene el sector para esta tierra».
Una importancia, recordó, que más allá de lo meramente económico, ya que «nada fija más población y nadie cuida mejor del medio ambiente en esta región que el sector agropecuario y la industria agroalimentaria».
Cabañero, de hecho, aprovechó para recordar que si la cita de ayer en Almansa era importante, no lo era menos la que está prevista para hoy, en Albacete, «que es la inauguración de la feria Expovicaman» donde se presentarán los productos y productores que estarán en el palmarés de los Premios Gran Selección Campo y Alma de 2025.
Lo viejo y lo nuevo. En su turno de palabra, el consejero de Agricultura, Julián Martínez, comenzó por referirse a los propios premios, al señalar que son, a la vez, los galardones más veteranos y los más noveles de la comunidad.
«Nacieron hace 35 años como los Premios Gran Selección», recordó, «pero hace tres años, incorporaron la denominación Campo y Alma, una marca que a pesar de su juventud ya goza de un amplio reconocimiento tanto dentro como fuera de España».
Este reconocimiento tan rápido, indicó, es posible «porque detrás de é hay un enorme esfuerzo, el de los hombres y las mujeres de esta región que llevan el nombre de Castilla-La Mancha por todo el mundo» gracias a la enorme calidad de los alimentos que elaboran.
Sobre los premios y las diferentes categorías, el consejero quiso hacer una puntualización, y que ha habido casos como el de la DOP Nuez de Nerpio que fue del todo imposible llegar a tiempo a los premios de este año, porque algunos de los organismos de esta nueva Denominación «aún estén en proceso de constitución».
Tras ello, llegó el momento de la entrega de los diferentes premios y distinciones de los Premios Gran Selección Campo y Alma 2024 y, para cerrar, tomó la palabra el orador principal de la jornada, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
Un guiño local. Comenzó el presidente al anunciar que el Día de la Región, el 31, «la sumiller de Maralba, Cristina Díaz, será nombrada hija adoptiva de Castilla-La Mancha, por poner a su restaurante en lo alto de la gastronomía».
Enlazó este reconocimiento con otro logro similar, el altísimo nivel logrado por la industria agroalimentaria de la región, «que ya nos causa problemas a la hora de dar estos premios, porque ¿cómo se puede decir qué es lo mejor entre lo que ya es excelente?».
Recordó que, hace 35 años, este premios nacieron «para estimular la calidad» en su sector agropecuario que ya era muy potente «pero que entonces apostaba más por la cantidad». Una misión más que cumplida, reconoció, al cabo de una auténtica carrera de fondo.
«No ha sido fácil, porque regalos no nos han dado ninguno», como lo demuestran todos los retos y frentes que se tuvieron que abordar para modernizar el campo y la industria agropecuaria y, entre ellos, recordó uno de los más duros y prolongados, el del agua.
«Créanme si les digo que esta batalla se va a ganar y no sólo porque el clima nos dé la razón, sino porque realmente siempre hemos tenido la razón», a pesar de las decisiones que adoptan los parlamentos de regiones como Murcia.
«Por si alguien tenía alguna duda, creo que han terminado de quitarse la careta», expresó, «porque ya han dicho que las reglas de explotación del trasvase son agua para todos, esto es, el agua para Murcia y el lodo para el Tajo».
«Han llegado a decir que se trasvase todo, sin restricciones, y creo que cuando se tira tanto de cuerda, se rompe; nosotros no solo tenemos razones, tenemos cinco sentencias del Supremo que nos avalen, y no vamos a parar, para tener la razón y para tener agua».