La sanidad privada «está haciendo un esfuerzo por retener el talento y mejorar las condiciones laborales» de los profesionales, un empeño que este colectivo también percibe, a la luz del informe publicado recientemente por el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS).  

El documento ofrece una panorámica de los perfiles profesionales de medicina y enfermería, así como su recorrido y percepción dentro del sector privado, con el objetivo de disponer de herramientas para mejorar su experiencia. 

«Con este estudio analizamos los retos y necesidades de los sanitarios para impulsar mejoras que fortalezcan su satisfacción y fidelización. Debemos trabajar juntos para ofrecerles el reconocimiento y las condiciones que necesitan para seguir brindando una atención de calidad», defendió el presidente de la Fundación IDIS, Juan Abarca, en el marco de la jornada Dando voz al profesional sanitario, que congregó a expertos del sector y contó con el presidente de la Organización Médica Colegial, Tomás Cobo, y con el presidente del Consejo General de Colegios de Enfermería, Florentino Pérez Raya.

La directora general de la Fundación IDIS, Marta Villanueva, presentó el informe junto a Alberto Córdoba, director general de Lukkap, consultora que lo llevó a cabo. En el estudio se analizó la experiencia de los sanitarios, mediante 1.328 respuestas y entrevistas a jefes de sección médica y dirección de enfermería. Entre los resultados, cabe destacar que quienes trabajan exclusivamente en la privada presentan mejores indicadores de satisfacción que los que compatibilizan su labor con la pública (un 72 por ciento en el caso de los médicos y un 69 por ciento en el de los enfermeros). 

La directora general de la Fundación IDIS subrayó que «los datos muestran que la conciliación y la autonomía del trabajo, no solo el salario, son las ventajas más valoradas por ambos colectivos».

El estudio también muestra que los profesionales valoran disponer de información actualizada. De hecho, más del 80 por ciento destaca que cuentan con herramientas que les facilitan la atención y el cuidado del paciente, así como las gestiones internas.

En cuanto a los motivos para cambiar de centro, el 25 por ciento de los médicos lo haría por oportunidades de desarrollo y el 21 por ciento, por mejores condiciones económicas, mientras que, en enfermería, el 34 por ciento se cambiaría por una mejora salarial. 

Entre las claves para mejorar la experiencia del personal sanitario, el estudio destaca la necesidad de fomentar la formación, el apoyo y el conocimiento compartido. En este aspecto, un punto a tener en cuenta es que a los responsables les gustaría tener mayor dedicación de tiempo a los equipos. 

Formación y desarrollo

El informe subraya que los profesionales que se sienten valorados y apoyados muestran una mayor fidelización hacia su centro. En este punto, los médicos valoran la orientación al paciente con un 7,7 y en enfermería lo hacen con un 6,5, lo que quiere decir que si existe una clara orientación al paciente, mayor es la fidelización y motivación. Además, el fomento de una  comunicación más fluida entre sanitarios es clave, tanto para el empleado como para el paciente. 

Entre las conclusiones, se desprende que todas las especialidades reclaman un mayor desarrollo profesional. «Este informe nos proporciona una visión clara de la experiencia de los trabajadores en la sanidad privada y nos permite identificar áreas de mejora. Es fundamental seguir apostando por la formación, el reconocimiento y el desarrollo profesional para garantizar no solo la satisfacción, sino también la calidad asistencial. La sanidad privada tiene la oportunidad de consolidarse como un entorno laboral atractivo y sostenible, que favorezca la fidelización del talento», concluyó Villanueva.