El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, incidió en la necesidad de «agrupar y ordenar la cartera de servicios sanitarios» a nivel nacional de manera que no se invierta «desmesuradamente». «Es básico, no podemos tener todos de todo para todo y que la inversión sea desmesurada», dijo durante el desayuno socio-sanitario organizado por Europa Press este lunes.

En este sentido, el consejero resaltó que, en materia sanitaria, «hay que tener lo más importante» de manera que se estructure y se ordene la cartera de servicios sanitarios entre comunidades autónomas sin «seguir creciendo desmesuradamente y de cualquier manera» porque así «la inversión se va».

«Cuando se habla de la financiación todo el mundo pretende que haya un pacto por la Sanidad, yo no me niego, pero no es mi prioridad. Mi prioridad es la financiación. No debe haber pacto hasta que no haya una financiación adecuada y hasta que todos no partamos del mismo nivel», añadió.

Por este motivo, el consejero pidió al Estado una «correcta financiación» que «no tiene que ver solo con el PIB per cápita sino que tiene que ver con la dispersión, con la demografía, con la cronicidad, con el envejecimiento porque el envejecimiento lo que conlleva es más inversión».

Asimismo, apuntó que «la medicina privada tiene que ser complementaria con la pública» porque «cuando le va bien a la pública le va bien a la privada y viceversa». «Se trata de ordenar la cartera y por eso a veces hay que crecer ayudándonos», manifestó.

«Transformar la Sanidad en salud, seguir con la tecnología, con la innovación y la investigación y seguir formando gente que se quede con nosotros será el éxito de los siguientes años y así vamos a seguir», apostilló el responsable de las políticas sanitarias en la región.

Replantear el Plan de Salud Mental. Asimismo, Jesús Fernández Sanz aseguró que la comunidad autónoma tendrá que replantear su Plan de Salud Mental, que tiene hasta el año 2025 como horizonte, para ser «más ambiciosos» y reforzar aspectos como la prevención del suicidio, especialmente en la edad infanto-juvenil, y la lucha contra las adicciones, haciendo hincapié en algunas como las relacionadas con las pantallas.

El consejero defendió que el Plan de Castilla-La Mancha incluye estos aspectos de vigilancia del suicidio y las adicciones, pero ha reconocido que estas circunstancias «han evolucionado» y hoy día los intentos de suicidio en personas jóvenes «se han multiplicado» y las adicciones a no sustancias «han crecido exponencialmente».

«Debemos prepararnos para unos siguientes años en los que esto sea protagonista», vaticinó.

Dice que no ha sido consultado para la futura Ley nacional de Reducción de Listas de Espera 

El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, aseguró que el PSOE y Sumar «no les han consultado nada» sobre el desarrollo de la futura Ley de Reducción de Listas de Espera del pacto entre ambos partidos.

«Bienvenidas sean todas las ideas para mejorar el sistema, pero les tocará a las comunidades autónomas desarrollarla, pero no sé cómo quieren hacerlo, no nos han consultado nada», declaró, incidiendo en la importancia de que esta norma venga apoyada con más inversión. «Supongo que viene con un remolque de dinero detrás para que se lleve a cabo porque con lo que tenemos ya estamos nosotros haciendo la norma», añadió.

El pacto acordado entre PSOE y Sumar incluye que se pongan por Ley unos tiempos máximos de espera en la sanidad pública, estableciendo 120 días para intervenciones quirúrgicas, 60 días para consultas externas especializadas y 30 días para pruebas complementarias, con independencia del lugar de residencia. Además, en el caso de la salud mental la garantía de tiempo máximo de espera será de un máximo de 15 días para jóvenes, adolescentes y menores de 21 años.