Prevenir los fraudes telefónicos , domiciliarios y procedentes de mensajes a través de los dispositivos móviles. Es el objetivo de la charla sobre ciberseguridad impartida en la mañana de ayer, en la Posada del Sol, dentro del Plan Mayor Seguridad del Ministerio del Interior. Una charla que en La Roda estuvo enmarcada en las actividades de la Semana del Mayor.
El agente Francisco Hernández, componente del Equipo de Investigación Tecnológica EDITE, de la Comandancia de la Guardia Civil de Albacete, junto a Pascual Vila, vicepresidente de la Asociación Provincial de Tecnologías de la Información de FEDA y CEO de Avania Márketing y Comunicación, expusieron ante los presentes casos reales de estafas y dieron consejos de seguridad, además de aclarar las dudas planteadas.
Ante la sospecha de una estafa a través de mensajes al teléfono móvil, se debe verificar el remitente, revisar los enlaces, leer detenidamente y desconfiar de solicitudes de información personal como datos bancarios o el DNI. Tampoco se deben abrir mensajes relacionados con facturas o paquetes que no hemos solicitado.
Y es que ante la duda, antes de hacer click se debe consultar con familiares o amigos de confianza.
Según Francisco Hernández, dependiendo del sector y el rango de edad, una de las estafas más comunes dirigidas a las personas mayores es «inventar que alguno de sus hijos ha tenido algún problema y está en apuros». Los estafadores, suplantando la identidad del hijo desde otro dispositivo móvil, piden dinero a los padres, asegurando que no pueden contactar con ellos desde su teléfono. «Es como trasladar el mundo físico al virtual, como cuando venían a casa y se hacían pasar por el técnico del gas, logrando acceder a la vivienda y al final robarles, o cualquier otro tipo de hecho delictivo, como siempre, únicamente van al tema del dinero».
El agente de la Guardia Civil asegura que el elemento fundamental es la desconfianza. «Se podría resumir todo en esa palabra porque cuando alguien se dirige hacia nosotros damos por hecho que es un ente verificado y no siempre es así». En estas charlas se insiste sobre todo en «el sentido común y la desconfianza» y ante cualquier sospecha recomiendan a los mayores consultar con familiares o amigos de confianza.