El vicario parroquial de La Roda, José Valtueña Gregorio, será el capellán fijo de la plaza de toros de Albacete, una figura tradicional de la fiesta nacional que se recupera en el coso de la capital, tras la firma de un convenio entre el Ayuntamiento y el Obispado, materializada por el alcalde, Manuel Serrano, y el obispo de la Diócesis, Ángel Fernández.
El capellán taurino es una figura de relevancia vinculada a la historia de la tauromaquia, aunque actualmente está presente en un reducido número de plazas, por lo que con este nombramiento se potencia y revitaliza su presencia en el contexto de la celebración, en representación de la Iglesia Católica.
En un acto celebrado en el patio de caballos de la plaza de toros, que contó también con la presencia de los dos presidentes de la misma, Genoveva Armero y Joaquín Coy, así como con numerosos alumnos de la Escuela Taurina, el regidor albacetense destacaba que «la capilla de la plaza tendrá desde ahora más vida espiritual gracias al convenio suscrito con el Obispado», al tiempo que aludió al reciente primer Encuentro Internacional de Capellanes y Sacerdotes Taurinos, celebrado el pasado fin de semana en Zamora, «donde se puso de manifiesto la importancia histórica de esta figura y su vigencia en una fiesta nacional que en sí misma es un compendio de respeto por la tradición y de amor por las buenas costumbres y valores que nos transmitieron nuestro mayores», apuntaba Serrano, un evento que congregó a numerosos sacerdotes de diversas órdenes llegados desde distintos puntos de España e Iberoamérica.
José Valtueña será el capellán estable de la plaza de toros - Foto: Rubén SerralléEl primer edil también hizo hincapié en que «la religiosidad es algo inherente a muchos de los toreros y profesionales del mundo del toro, la vida y la muerte se dan la mano en la fiesta y por eso muchos toreros y subalternos se encomiendan a Dios, a la Virgen y a los santos de su devoción antes de saltar al ruedo, en un acto íntimo y profundo».
Por su parte, el obispo de Albacete aseguraba que «la plaza de toros de Albacete por su gran y merecida importancia no podía estar sin capellán estable, como tienen muchas de las grandes plazas de España». Ángel Fernández agradeció al alcalde «darnos esta oportunidad de que la fe católica, profesada por una gran mayoría de toreros, pueda tener su sitio dentro de la plaza de toros de Albacete».
Por su parte,José Valtueña, que asumirá su primer reto como nuevo capellán en el festejo a beneficio del Cotolengo del 18 de mayo, reconocía asumir esta responsabilidad con «profundo agradecimiento e ilusionado por cubrir una necesidad que era evidente, en un mundo donde se ponen en juego la vida de hombres valientes que mantienen una tradición tan nuestra».
Colectivos profesionales y de aficionados sienten de forma unánime que la tauromaquia les debe un reconocimiento a los capellanes, en ocasiones, grandes aficionados a la fiesta de los toros, cuya elogiable y respetada labor es estar pendientes del bienestar espiritual de los toreros antes de la lidia.