Dos tramos del nuevo colector de la Cañada baja se han hundido y han tenido que ser reparados. Los trabajos finalizaron el pasado 2 de abril. Ante los medios de comunicación, el concejal de Urbanismo, Luis Fernández, ha explicado que "la empresa adjudicataria de la obra les ha transmitido que es normal porque hasta que la tierra no se asienta bien se puede reabrir". De tal manera que tras el hundimiento en dos zonas del colector se ha llevado a cabo "una limpieza de la zona, un saneamiento, un compactado con materiales sólidos y un hormigonado", explicaba Fernández.

El nuevo colector de la Cañada baja comienza en la piscina cubierta David Castro Fajardo y conecta con el zanjón de pluviales del parque de La Cañada donde evacúa el agua recogida en la parte alta. Las obras del nuevo colector finalizaron recientemente, a finales del año 2023.

Ayer, el concejal de Urbanismo comparecía ante los medios para informar "con transparencia" sobre las actuaciones llevadas a cabo por parte de la empresa que ha ejecutado las obras tras el hundimiento de dos tramos. El concejal apunta que "en caso de que la tierra se vuelva a abrir, la empresa llevará a cabo las actuaciones oportunas, que es como tiene que ser porque las obras tienen su garantía". Un riesgo que se encuentra, sobre todo, "en la zona pegada al hormigón" que sujeta la valla del parque. Las actuaciones se repetirán hasta que la superficie del colector quede totalmente compactada.

Los hundimientos han tenido lugar donde desagua el colector cuya función es evitar las inundaciones en las viviendas ubicadas en este barrio. En este sentido, el concejal añadía que "la obra ha dado respuesta al problema que tenían los vecinos. Era una necesidad urgente porque cada vez que llovía se producían inundaciones en las viviendas y garajes".

Con las lluvias de esta Semana Santa, "hemos podido comprobar que este nuevo colector cumple con creces el objetivo que nos planteamos". Luis Fernández asegura que los vecinos "están muy contentos" porque en los días de lluvia muy abundante, "han caído en torno a 60 litros y la rambla iba llena de agua", el colector ha sido capaz de evacuar el agua al zanjón de pluviales. Hasta ahora, desde que se ejecutó la obra, no había llovido, por lo que los vecinos de la zona estaban pendientes de comprobar el correcto funcionamiento de este proyecto. Tras las lluvias de la semana pasada, miembros del equipo de gobierno visitaron la zona y "varios vecinos nos trasladaron su satisfacción y el agradecimiento por esta solución".

El colector no será suficiente en caso de lluvias torrenciales, "por ejemplo, lluvias de 100 litros en media hora, no solo aquí, probablemente en cualquier sitio, pero el objetivo que buscábamos se ha cumplido".

El nuevo colector ha tenido un coste de 216.000 euros de los que el Ayuntamiento ha aportado el 25%, en torno a 54.000 euros.